Finaliza la vendimia en Jerez y lo hace con unas sensaciones agridulces. Por una lado se ha conseguido un producto de excelente calidad, pero por otro se ha producido una notable reducción en la cosecha debido a la ausencia de lluvia. Las condiciones climatológicas del año agrícola han sido particularmente secas, con un nivel medio de pluviosidad ligeramente por encima de los 300 litros, lo que apenas supone la mitad de la lluvia recogida en un año normal.
Tras el último año de arranques subvencionados por la OCM, la superficie inscrita en el Consejo Regulador asciende actualmente a 7.062 hectáreas, distribuidas entre 2.514 explotaciones a lo largo de los nueve términos municipales que forman la Denominación de Origen. La superficie media del viñedo se sitúa por tanto ligeramente por debajo de las tres hectáreas, si bien con notables diferencias entre municipios.
La producción total se ha situado en 46.978.932 kilos, lo que supone un descenso global del 27% con respecto a la cosecha del pasado año. Nuevamente, el descenso de producción por hectárea ha afectado de forma muy diferente a los distintos términos municipales de la Denominación; los viñedos de Trebujena han producido prácticamente un tercio menos que en 2012, mientras que en algunos términos costeros como Chiclana y Chipiona se ha recogido incluso más producción por hectárea que en la pasada vendimia.
Como es habitual, la vendimia se ha desarrollado de forma muy escalonada, comenzando en el interior y extendiéndose progresivamente hacia los pagos más próximos a la costa. El grueso de la actividad se concentró en la última semana de agosto, siendo los últimos lagares en cerrar los de las localidades costeras y, particularmente, los dedicados a la molturación de la uva moscatel.
La de este año ha sido la tercera vendimia incluida en el Plan de Viabilidad firmado en 2010 por la Consejería de Agricultura y Pesca de la Junta de Andalucía con las organizaciones profesionales del Marco de Jerez. En base a dicho plan, aproximadamente 525 hectáreas de viñedo inscrito se encuentran acogidas al Plan Piloto según el cual su producción quedará íntegramente destinada a la elaboración de mosto concentrado rectificado.