Un joven jerezano que disfrutaba de la movida nocturna el 26 de diciembre de 2009, jamás podrá olvidar esa fecha en la que sufrió una agresión que podría haber cambiado su vida para siempre. Los dos supuestos atacantes, Óscar M. G. y José Manuel C. G., se han sentado ahora en el banquillo de la Audiencia Provincial de Jerez acusados de un presunto delito de lesiones. Según el fiscal, en la madrugada del citado día se inició una reyerta en el bar Javrock, situado en la calle Muro. La víctima, al ver cómo un amigo suyo estaba siendo agredido, intervino y fue acometida en ese momento y presuntamente por los dos procesados, a quienes no conocía de nada.
Como explicó el representante del Ministerio, el joven comenzó a recibir patadas y golpes y uno de los imputados, concretamente Óscar M. G., le dio un mordisco en el lóbulo superior de la oreja izquierda. La pelea solo cesó cuando intervino el personal del local y les expulsó del mismo. Como consecuencia de todo ello, la víctima perdió parte de la oreja y sufrió un traumatismo en la mano derecha con fractura de un dedo, así como arañazos. Para su curación, precisó de un tratamiento médico-quirúrgico con inmovilización de la fractura, analgésicos y fisioterapia, que tardó 120 días en sanar y le dejó ciertas secuelas.
Por todo ello, el fiscal solicita cuatro años de prisión para Óscar M. G. y tres años para José Manuel C. G., más una indemnización al perjudicado de casi 14.000 euros. La acusación particular, por su parte, pide seis y tres años de cárcel, respectivamente, mientras que la defensa aboga por la libre absolución puesto que los procesados aseguraron en el juicio que ellos estaban en el bar de copas en el momento de los hechos, pero que no participaron en ninguna pelea.