Íñigo Vélez esquiva, de momento, la sala de operaciones. Los servicios médicos del Xerez, junto al doctor que ha estado examinando la rodilla del delantero han llegado a la conclusión de que lo mejor para la rodilla de Vélez es recibir un tratamiento conservador. Fabián Belmonte, médico azulino, ha explicado que “Iñigo tiene una lesión del menisco externo y en los últimos días hemos estado barajando la opción de pasar por el quirófano, ya que es lo que se veía como más probable. No hay que olvidar que en su rodilla tiene practicada una plastia del cruzado de hace un tiempo, pero tras considerar un poco su estado nos vamos a decantar por hacer un tratamiento conservador y no intervenir. Se considera que ese tipo de lesión la podría llegar a tolerar. Si realizamos esta operación se le quedaría una rodilla candidata a padecer más lesiones durante su vida deportiva. Vamos a intentar mantener todas estructuras articulares íntegras con este tratamiento. Estaremos realizándolo unas tres semanas y a partir de ahí entrará con el grupo para ver cómo lo tolera. En caso de que no vaya bien, habrá que volver a pensar en la cirugía pero creo que merece la pena intentar esto. Íñigo está muy bien, pues con este tratamiento se está hablando de un tiempo de recuperación inferior, por lo que está mejor”.