A sus 86 años, José Manuel Caballero Bonald está viviendo unos meses de vértigo desde que el pasado noviembre fue reconocido con el Premio Cervantes, el máximo galardón de las letras españolas. Mientras escribe su discurso del próximo 23 de abril, Seix Barral saca a la venta ‘Oficio de lector’, un conjunto de textos y reflexiones sobre los autores más admirados por el escritor jerezano que ha llegado a las librerías rodeado de expectación. Con su amabilidad habitual, ha dedicado unos valiosos minutos a REPORTEROS JEREZ
-¿Cuáles son las principales reflexiones que se plantea en este conjunto de textos sobre literatura?
-Bueno, no me planteo ninguna reflexión en particular. Se trata más bien de glosas, de comentarios sobre lecturas muy diversas. En realidad es una recopilación de textos escritos más o menos en el último medio siglo y que andaban dispersos por ahí. Digamos que lo que he querido es dejar constancia de mis predilecciones en materia literaria, establecer un canon de mis ideas estéticas sobre la literatura.
-¿Cuánta importancia tiene el papel del lector en el proceso literario?
-Una importancia muy considerable. Uno se hace escritor porque primero leyó a unos escritores que le abrieron un camino, lo incitaron al cultivo del arte de escribir. Sin el aprendizaje de esas lecturas previas difícilmente se llegaría a ser escritor… Me gusta repetir que el lector justifica la literatura.
-¿Se ha menospreciado o se menosprecia el valor de los lectores?
-Yo creo que los lectores, los buenos lectores son más bien escasos. Se lee, eso sí, pero un poco atropelladamente o consumiendo esos productos del mercado de la subliteratura… Ocurre como con la escritura. Hoy se escribe mucho, pero los escritores de verdad, los que se preocupan de explorar en nuevas rutas lingüísticas, los que crean un estilo, se pueden contar con una mano.
-¿Hace falta educar a mejores lectores, más críticos, más conscientes de lo que leen? ¿Cómo?
-No sé, esa es una cuestión de pedagogía o, mejor, de educación escolar. Lograr que el niño se sienta atraído por los libros, procurar que vea en los libros una forma de participación en la aventura de vivir, es realmente la labor esencial de un profesor de literatura. Tan simple como eso.
-¿Hay más expectación en torno a esta publicación por el Premio Cervantes?
-Sí, supongo que sí. Una evidencia, por cierto, que no sé si me estimula o me produce cierta desazón.
-Y, por último, ¿algún texto que destaque especialmente, al que le tenga especial cariño, de ‘Oficio de lector’?
-Pues no sé, tendría que ojear el índice… Que yo recuerde ahora, me quedo con los textos que dedico a la poesía de Cervantes, a la obra narrativa de Onetti, a “Españoles de tres mundos” de Juan Ramón Jiménez, a “Figuras de la pasión del Señor” de Gabriel Miró, a Camus, a Cunqueiro… Por ahí es por donde me encuentro más a gusto…