Era cuestión de días. Con todo lo que está sucediendo en el Xerez era bastante probable que volvieran a producirse gestiones y movimientos para la venta de las acciones de la entidad, y de hecho ya están teniendo lugar, pues el grupo de Joaquín Morales está tratando de desprenderse del paquete accionarial mayoritario.
En principio, es más una intención que una realidad. De hecho, hasta la fecha se están produciendo ofrecimientos, pero el problema es que parece complicado que esas gestiones lleguen a buen puerto. Hay que tener en cuenta que el bloqueo institucional en el que se encuentra el club es tremendo y que haría falta un buen puñado de euros para que la entidad saliera viva de esta batalla.
Pero también hay que tener presente que el grupo que encabeza Joaquín Morales sabe que se encuentra en un callejón sin salida, que su presencia le está causando más daño que beneficio a la entidad y que vender el paquete accionarial es una de las pocas salidas que resta en estos momentos.
Por otra parte, desde el punto de vista del comprador, quizás pueda ser un buen momento para tomar las riendas del club, pues el empresario nazareno es consciente de que tiene un tremendo problema sobre la mesa. Atrás quedaron los años en los que Morales pedían cantidades inalcanzables o llenaba de obstáculos las negociaciones de compra-venta. Ahora mismo el Xerez le quema en las manos y las facilidades para deshacerse del club pueden ser todas.
A día de hoy las cantidades que se están solicitando son algo elevadas, ya que no se puede olvidar que el Xerez tiene un pie en Segunda B y una tremenda deuda. Por lo que el paso de los días aclarará si el proceso de venta continúa adelante.