Esther Alonso tiene 17 años y un gran futuro ante sus ojos. Estudiante brillante, esta jerezana alumna del instituto El Pilar, acudirá en septiembre a Argentina para participar en la final iberoamericana de las Olimpiadas de Biología después de haber superado las fases regional y nacional. “Sé que va a ser difícil pero merece la pena el esfuerzo”, asegura a joven con una asombrosa madurez y disposición a seguir trabajando durante sus merecidas vacaciones de verano.

Esther, que quiere estudiar Medicina, convive con la Biología desde pequeña ya que es la profesión de sus padres. “Me encanta. Lo que más me gusta es la bioquímica, el estudio de las células…”, dice. Para llegar a este nivel en el concurso, Esther quedó la primera de Andalucía en la primera fase del certamen frente a otros 70 candidatos y entre los cuatro segundos de la fase nacional. Durante las pruebas, se ha enfrentado a exámenes tipo test y supuestos prácticos relacionados con la zoología (disección de una cigala), estudiar el comportamiento de las moscas del vinagre, clasificar musgos y líquenes o analizar ADN. En Argentina también tendrá que realizar con éxito pruebas teóricas y prácticas de mayor dificultad para llegar donde ningún español lo ha hecho nunca: a los primeros veinte puestos. De hecho, ya ha batido el récord en su instituto, donde llevan presentando alumnos a este certamen desde hace cuatro años y nunca habían llegado tan alto.

Una de las actividades que más está disfrutando es que la organización del certamen -integrada por personalidades del mundo de la biología en España- lleva a los candidatos a conocer laboratorios profesionales y centros de investigación, como el que visitarán en Navarra en el mes de julio para prepararse para la final. “La experiencia está siendo estupenda. Sabía que participando en este concurso me llevaba cosas muy buenas: la gente que he conocido y la ilusión que veo que ponen en nosotros”, asegura la joven, que no quiere dejar pasar la oportunidad de agradecer a su profesora, Lourdes Martínez del Cerro, los ánimos y la preparación para las pruebas. “Yo he tenido dudas porque lo primero es terminar Bachillerato y hacer una buena Selectividad, y ella me ha animado mucho”, explica.

También tiene el apoyo de sus compañeros de clase “que incluso me han hecho una fiesta sorpresa”, cuenta esta chica que a pesar de su juventud tiene un impresionante currículum. La biología no es su único punto fuerte ya que Esther tiene también terminado el Ciclo Medio de Viola en el Conservartorio de Jerez, el título de inglés First, un premio literario de su instituto y el Premio a la Excelencia Educativa en 4º de ESO que otorga el Ayuntamiento por su trayectoria. También ha estado cuatro años participando en el proyecto Estalmat, de la Sociedad Matemática Thales.