Energy no ha tenido más remedio que recular y dar marcha atrás a sus amenazas de llevarse al Xerez CD de Jerez al no poder jugar sus partidos oficiales en el Municipal de Chapín. En una semana de contactos entre los propietarios de la sociedad y el Ayuntamiento de Jerez, no era viable que el conjunto azulino disputara el encuentro de esta tarde ante el Alcalá en el Municipal jerezano, por lo que los sevillanos han decidido dar marcha atrás y volver a jugar en las instalaciones deportivas de La Granja.
El club tenía decidido que allí no iban a volver a jugar. De hecho, se siguen manteniendo contactos con otros municipios para llevarse al equipo fuera cada quince dias, aunque, por el momento, el Xerez CD no se mueve de Jerez. Esto ha acarreado serias consecuencias, ya que, a falta de pocas horas para que se disputa el encuentro, el club no tiene ni entradas impresas ni ha cerrado el precio de cada localidad. Solo se han repartido entradas correspondientes al primer partido de Liga a los jugadores de los equipos de fútbol base de la ciudad, unas entradas que, a priori, serán las que se entreguen esta tarde en las taquillas improvisadas de La Granja.
Energy achaca al Ayuntamiento este contratiempo, alegando que hasta ayer no sabían dónde se iba a disputar el encuentro, aunque lo cierto es que el Consistorio jerezano tenía muy claro que La Granja iba a ser el único escenario de un club al que sus propietarios han puesto precio para su desaparición.
Según ha informado hoy Diario de Jerez, fuentes municipales han desvelado que dentro de los contactos de esta semana entre Energy y Ayuntamiento, Ricardo García habría puesto sobre la mesa un precio para marcharse del Xerez, previa solicitud de disolucion en el Juzgado de lo Mercantil de Cádiz. Se habla de 750.000 euros, aunque la cantidad ascendería a un millón de euros en caso de que la RFEF le devolviera al club la plaza en Segunda B, un rumor que dentro del Xerez están haciendo correr de cara a la reunión de mañana de la Federación Andaluza con los clubes de Tercera División.