El presidente de Asaja-Cádiz, Manuel Vázquez Gavira, ha planteado dos temas esenciales para la provincia de Cádiz: Los cambios en el Gobierno andaluz, en concreto en la Consejería de Agricultura y en la de Medio Ambiente, y la “injustificada bajada de los precios de las materias primas agrarias”.
Antes de hablar del Gobierno actual, Vázquez expresó su reconocimiento al consejero “saliente”, Luis Planas, “por su magnífica capacidad de interlocución con todo el sector y por haber dado un alto nivel a la Consejería”. Asimismo ha destacado su facultad para la gestión “sacando muchos temas que estaban en los cajones para solucionarlos”. De ese mismo equipo, ha alabado la eficacia en el trabajo del viceconsejero, que sigue ostentando el cargo, Juan Antonio Cortecero.
No se mostró tan displicente con la vuelta a la separación de Agricultura y Medio Ambiente en dos consejerías porque a su parecer “ambos aspectos tienen que ir de la mano”. Dicho esto, felicitó por su nombramiento a sus titulares, Elena Víboras y Mª Jesús Serrano, a quienes ofreció colaboración y tendió la mano “para resolver todas las cuestiones que atañen al sector”. En esta línea y apostillando que lo hace “sin desmerecer al equipo técnico actual”, mostró su preocupación por el cambio del equipo técnico cuando “las negociaciones de la futura PAC se encuentran prácticamente en la prórroga del partido”. Añadió que ese partido “tuvo un gran inicio con un buen equipo liderado por Judith Anda, secretaria general de Agricultura anterior” y ahora “sin desmerecer al equipo actual, ha cambiado y me preocupa”.
Bajada injustificada del precio de la pipa de girasol y el maíz
Respecto al segundo tema, la bajada de precios en las materias agrarias, hizo hincapié en que la bajada del precio pagado al agricultor por las pipas de girasol, de 75 a 55 pesetas (0.451 a 0.410) oscilación que ha considerado “totalmente injustificada” por dos razones: “el mercado nunca actúa en esos niveles de acuerdo” y ”el precio del aceite de girasol en las estanterías de los supermercados no ha bajado”.
Para frenar estas oscilaciones en los precios, que también se están repitiendo en el maíz, pidió la tutela de las Administraciones para que “vele porque la bajada de los precios al agricultor se deban a situaciones normales de mercado y no a una situación dominante de los compradores”. Manuel Vázquez sitúa otro freno en tener “resistencia económica” o en poder almacenar. La primera cuestión “depende de cada empresa y vivimos una situación económica muy delicada en la que no hay fluidez de crédito”. En cuanto a poder almacenar, cree indispensable que “se ponga al servicio de los agricultores la red de silos que existe para frenar la desprotección que sentimos los agricultores con estas bajadas de precios”.