La corporación del Santo Crucifijo ha presentado hoy, en un acto que ha llenado el salón capitular de su casa de hermandad, la nueva bandera pontificia que desde este preciso momento se incorpora al ya de por sí amplio altar de insignias que posee la entidad que dirige José Gallego Márquez.
Con la presencia de Jesús Rosado y Lorenzo Otero, bordador y diseñador respectivamente de la bandera pontificia, la hermandad ha presentado en sociedad una donación realizada por un amplio grupo de hermanos. El diseño de Otero enmarca en dos orlas los escudos del papa Pio XII y el escudo de la hermandad penitencial antes de la fusión con la hermandad sacramental, todo ello rematado con los símbolos pontificios.
El acto ha sido presentado por Francisco Toro, diputado de Cultos de la cofradía de San Miguel y promotor principal de esta donación, y presidido por el vicario de San Miguel, don Manuel Jesús Barrera Rodríguez quien, tras rezar por la pronta recuperación del director espiritual y párroco de San Miguel, donÁngel Romero Castellanos, ha cedido la palabra al bordador, Jesús Rosado. El maestro astigitano ha comenzado su intervención alabando el diseño ejecutado por Lorenzo Otero, “realizado con una composición y armonía que ha facilitado mi trabajo. Conocíamos el altar de insignias de la cofradía por lo que teníamos un doble compromiso, con la propia hermandad y con la calidad del dibujo”. El bordador explicó que decidió apostar por un bordado primigenio, “el principio de los bordados en seda y oro. Contrariamente a lo que se piensa, es de una dificultad máxima, y puedo garantizar que es una pieza de primer nivel, realizado con un punto de oro tendido o llano, sin rellenos, y trabajando también el punto de matiz, que es como dibujar con las sedas”.
Tras una breve semblanza de Rosado sobre la historia del bordado que justificaba su elección por ese estilo de ejecución, Lorenzo Otero agradeció a la comisión de hermanos que se han encargado de donar esta bandera “su confianza. No es fácil, por mi edad, que se confíe en mí para completar un altar de insignias de semejante nivel, por lo que quiero agradecer a todos su ofrecimiento”. El autor del diseño de la bandera quiso acordarse de su padre, ya que aseguró que su formación académica está en el campo de la Historia del Arte, pero que ha aprendido en casa las técnicas del dibujo y la pintura. “Muchas veces”, añadió, “un buen dibujo queda diluido por caer luego en las manos equivocadas a la hora del bordado. Todo el mérito es, por tanto, de Jesús Rosado“.
Cerró el acto el nuevo hermano mayor de la corporación,José Gallego Márquez, quien quiso agradecer a todos su asistencia, y en especial a los “hermanos que han peleado para que esta bandera sea hoy una realidad. Estamos plenamente satisfechos del trabajo de Jesús Rosado, y ojalá pronto se vea consolidada esta relación con futuros encargos”. El hermano mayor quiso acordarse de Antonio García Falla, orfebre autor del asta y remate de la bandera, así como de las varas a juego que estrenará la hermandad la próxima Semana Santa.
A la conclusión del acto, todos los asistentes pudieron brindar con un Jerez de Honor.