La Palma se está jugando la permanencia. El conjunto onubense regresó a la Tercera División del fútbol español esta temporada y tiene la permanencia en su mano, aunque para ello, para cumplir su centenario en categoría nacional, tiene que enfrentarse a rivales directos como el Pozoblanco o el Xerez CD, su rival este próximo domingo.
Por ello, el club onubense ha enviado un mensaje a su afición en forma de vídeo para que acudan en la matinal del domingo al campo municipal para animar a los suyos ante un viejo conocido, un Xerez que, según el vídeo publicado por el club, regresa a La Palma porque “el destino nos ha vuelto a enfrentar”, añadiendo que “juntos lo conseguiremos”.
Con esa frase acaba un documento no exento de polémica, ya que recuerda aquel desgraciado encuentro de mayo de 2013 entre el cuadro onubense y el filial del Xerez. Los dos equipos se jugaban el ascenso de categoría y el resultado acabó a favor de la escuadra local por la mínima, ya que el colegiado tuvo que suspender el encuentro a poco más de 20 minutos para el final por incidentes graves entre jugadores y aficionados.
De aquel encuentro, la expedición azulina denunció que fue “una encerrona” desde el principio, y que, de no ser por la presencia de un grupo de aficionados del Kolectivo Sur, “hubiera acabado peor”. De hecho, el Xerez presentó un parte de lesiones a su llegada a Jerez, aunque en la localidad onubense tenían otra postura. Y es que el presidente de La Palma no dudó en culpar a los “energúmenos del Xerez” como culpables, e hizo oídos sordos a los presuntos gritos racistas que denunció Emaná, por parte de jugadores y aficionados de La Palma.
Aquellos incidentes se saldaron con una sanción económica para el Xerez y duros castigos para los azulinos Emaná y Zafra, pero la Federación dejó sin sancionar los presuntos insultos racista que denunciaba el Xerez, además de la pérdida de tres puntos vitales, ya que el Comité decisió suspender el encuentro al encontrarse el filial azulino con solo siete jugadores de campo, según el acta dle encuentro.
A pesar del ánimo encendido que se va a encontrar el conjunto azulino este domingo en La Palma, a los pupilos de Paquete Higuera no les queda más que buscar la victoria ante un rival directo. Kevin, joven central azulino, que este fin de semana pasado volvió a jugar de lateral derecho, reconoce que “la cosa está complicada, es la realidad, somos un equipo recién llegado, pero no nos vamos a rendir porque no está todo perdido y hay posibilidades de tirar para arriba”.
El defensa jerezano confiesa que “despertarte e ir a entrenar es duro, sobre todo si nos pasa lo que nos pasa todo los fines de semana”, pero apunta que no le faltan “ganas de entrenar para ayudar al equipo”, un equipo que se encuentra “desanimando, pero hay que seguir adelante porque no nos queda otra”. En definitiva, según Kevin, “nos ha tocado un papel muy duro porque somos un grupo de niños que apenas nos conocemos en el campo, pero hay que ir con ánimo”.