El Xerez Deportivo FC vuelve este fin de semana a la que es su casa, regresa a Chapín, y para Carlos Orúe también es un motivo de satisfacción: “Teníamos muchas ganas de volver a Chapín. Imagino que tantas como los aficionados y nunca es tarde si la dicha es buena”.
Independientemente de la vuelta al estadio jerezano, el cuadro azulino es consciente de que afronta un duelo complicado y el técnico recuerda que tiene disponibles a “17 jugadores, pero afortunadamente los juveniles descansan este fin de semana y podremos recurrir a ellos si es necesario”.
El preparador azulino reconoce que “en principio se presenta un partido ante un equipo que te puede presentar dificultades si salimos con confianzas. El San Fernando es uno de los conjuntos que estará arriba y cuenta con futbolistas que están con el primer equipo. En este encuentro saldrán los que tienen que dar el callo de la primera plantilla, y en el segundo veremos si hay cansancio o lesiones”, añadiendo que “en función de eso, nos reforzaríamos con chicos de la cantera”.