Julio de la Rosa entró el pasado sábado en la historia cinematográfica de Jerez al ser el primer jerezano en recibir un premio de la Academia. De la Rosa se hizo con la estatuilla a la Mejor Música Original por su trabajo en La isla mínima, el largometraje de Alberto Rodríguez que desde sus inicios ha contado con el músico jerezano para ‘musicar’ sus películas.

“Estamos muy contentos todos, sobre todo porque es un equipo que puso en marcha Alberto (Rodríguez) hace ya algunos años y es una maravilla que después de estas cuatro películas se nos reconozca a todo el equipo el trabajo que hemos hecho”, asegura De la Rosa, en declaraciones al programa Hoy por hoy de Radio Jerez.

Además, el músico relata los sentimientos de la gran noche del sábado: “Es muy raro porque estás todo el rato nervioso. Si no te lo dan sabes que no le vas a dar una alegría a los tuyos, y si te lo dan es aún peor porque tienes que salir a hablar”. Además, De la Rosa destaca que recibir el premio, que lucirá en la sala de estar de la casa de sus padres en Jerez, “es una alivio y una alegría, no tan solo por el reconocimiento, sino porque hay mucha gente en su casa que da un bote en el sofá, como le pasó a mi madre que me han enseñado el vídeo y es una alegría verlos así”.

A la hora de recoger el premio, “mi primer recuerdo fue para mis padres, sin lugar a dudas, y era tanta la tensión que hasta que no he visto a mi familia por la ‘tele’ no me he emocionado”, reconoce De la Rosa.