Agentes de la Policía Nacional han detenido a un hombre de 46 años de edad, el cual ha ingresado en prisión por orden judicial, como presunto autor de siete robos ejecutados por el procedimiento del tirón que se habían venido produciendo en Jerez  desde finales del mes de julio, que además apuñaló a un agente para fugarse en un primer intento de detención.

Según ha indicado la Policía en un comunicado, para su localización se realizó un dispositivo de búsqueda, siendo interceptado el pasado 17 de agosto, aunque logró fugarse después de apuñalar a un agente. Finalmente fue detenido días mas tarde en el interior de una vivienda y tras ser puesto a disposición judicial ha ingresado en prisión imputado como presunto autor de los delitos de homicidio en grado de tentativa, robo con violencia y atentado a agente de la autoridad.

   Las primeras investigaciones realizadas por los agentes apuntaban a que dichos tirones los estaba perpetrando una persona a bordo de un ciclomotor, el cual actuaba principalmente en la zona centro de esta ciudad y cuyas víctimas eran en su mayoría mujeres que se encontraban haciendo turismo en nuestra ciudad.

Por ello, la Policía estableció un dispositivo con el objeto de identificar y detener al presunto autor de los robos, lo cual seprodujo el pasado día 17 tras producirse un nuevo tirón. Una vez interceptado y cuando se iba a proceder a su detención, el detenido se revolvió e intentó apuñalar a un policía en repetidas ocasiones con un cuchillo de aproximadamente 30 centímetros de hoja.

Como consecuencia de la agresión, el agente se vio en la necesidad de utilizar su arma reglamentaria, efectuando varios disparos al suelo para repeler la agresión, de la cual fue asistido en un centro médico de esta ciudad. No obstante, pese a los disparos de advertencia, el autor de los robos consiguió llegar hasta su ciclomotor, huyendo del lugar en dirección contraria al sentido de la circulación, por lo que no pudo ser detenido en esos momentos.

Finalmente fue identificado, pudiéndose comprobar que era un delincuente reincidente que contaba con 33 detenciones anteriores por hechos similares y que tras lo sucedido permanecía escondido en un domicilio de la localidad. Así, tras diversas gestiones por parte del grupo de investigación, pudieron determinar el domicilio donde se  escondía, por lo que una vez localizado, y con mandamientos judiciales de entrada y registro, fue detenido a pesar de tratar de huir a través de los patios a un domicilio colindante.

Tras ser imputado como presunto autor material un delito de homicidio en grado de tentativa, siete robos consumados con violencia y un atentado hacia agentes de la autoridad, fue puesto a disposición judicial, que tras oír su declaración decretó su ingreso en prisión.