Lebrija sigue siendo un campo maldito para el Xerez DFC. Los azulinos afrontaban su primera salida lejos de casa con la intención de refrendar su buen inicio de competición en liga, pero sufrirían un frenazo en seco. Pese a ser muy superiores a su rival y disfrutar de innumerables ocasiones de gol, los de Pérez Herrera se volvieron de vacío.

El buen inicio de partido del Xerez nada hacía presagiar lo que estaba por venir. Los azulinos -hoy de negro- impusieron su juego desde el inicio manteniendo siempre el balón en campo contrario y protagonizando continuas llegadas. Aun así, el primero estuvo a punto de llegar de libre directo, pero Isco le negaba el gol a Bello con una buena mano. Los buenos minutos del Xerez los contrarrestaba la Lebrijana como más duele: con dos goles en sus dos únicas llegadas. En la primera, los locales aprovechaban un rechace tras un saque de esquina y en la segunda, Migue remataba en el primer palo un buen servicio desde la derecha.

El partido cambiaba por completo de guión y el Xerez estaba obligado a remontar. La reacción llegó pronto, apenas dos minutos después del 2-0. Goma encontraba el camino al gol con un buen disparo desde fuera del área. Quedaba mucho partido por delante y el Xerez volvía a estar vivo.

De ahí al final del primer tiempo, los xerecistas siguieron imponiendo su juego y solo el larguero, tras una falta de Bello, evitaba que el partido se fuera al descanso con empate.

Tras la reanudación, más ocasiones para el Xerez, que mereció darle la vuelta al marcador. Oca con un disparo tras un saque de esquina volvía a exigir a Isco y luego Jacobo se quedaba a escasos centímetros de lograr el segundo. El Xerez perdonaba. Pero incluso le llegaría otra oportunidad franca. Bello, desde el punto de penalti, erraba el lanzamiento después de adivinarle Isco sus intenciones.

Fueron los mejores minutos del Xerez que dejaba escapar viva a la Lebrijana. Los locales, apenas se asomaron sobre el marco de Camacho, y supieron matar el partido en los compases finales. Los visitantes lo intentaron hasta el final con un disparo mordido de Valenzuela y una falta directa que terminaba en las manos del meta local.