Jerez se caracteriza por albergar algunos de los mejores profesionales de la salud de toda Andalucía. Especialistas de diversas ramas son consultados por pacientes de la comunidad autónoma. De hecho, incluso habitantes de otras zonas de España recurren a ellos, sabiendo que quedarán en las mejores manos posibles.
Una de las especialidades abarcadas es la del alargamiento del miembro viril. Quienes no están conformes con las dimensiones actuales de esta parte tan importante de su cuerpo no dudan en consultar qué alternativas a la cirugía de alargamiento de pene son viables hoy en día. Tras comprobar que, a pesar de haber métodos menos invasivos, no proporcionan unos resultados a la altura del citado procedimiento quirúrgico, acaban optando por someterse a él. Por supuesto, previamente se informan de cómo llevan a cabo la operación.
EL MÉDICO TRASLADA TODA LA INFORMACIÓN NECESARIA
Ya de por sí toda operación suele acarrear que el individuo lidie con cuantiosas dudas. Al tratar con una parte tan importante y sensible como es el pene, las cuestiones se ven incrementadas. Los médicos son conscientes de ello, así que al ser partícipes de una primera visita, trasladan los diversos datos que el usuario ha de conocer para determinar si quiere seguir adelante con el procedimiento quirúrgico.
En primer lugar se comentan los posibles métodos. El de las células madre y adiposas es el que más suele llamar la atención no solo de los jerezanos, sino también del resto de andaluces. Sin embargo, quienes prefieren gastar menos dinero -factor económico en el que también se profundiza, tal como veremos a continuación-, escuchan atentos las explicaciones del resto de sistemas.
Otros que están en pleno auge son los de la grasa y las mallas dérmicas. Cada técnica supone un mayor o menor esfuerzo por parte de los profesionales, así como la utilización de un material u otro. Por ende, el precio va variando.
Es innegable que en época de crisis económica, quienes quieren alargar su miembro viril se lo piensan dos veces si la inversión a llevar a cabo es estratosférica. Por suerte para todos ellos, no hablamos de una cifra desproporcionada si se pretende recurrir a un buen profesional con una contrastada experiencia.
Tras comprender qué tipo de cambio se obtiene con una cirugía de este calibre, el susodicho decide someterse a la operación, siendo consciente de que en poco tiempo ganará en autoestima y en muchos otros aspectos al poder presumir del tamaño que siempre había soñado.
ANESTESIA EPIDURAL SIN QUE SE NOTE NADA EN LA OPERACIÓN
Entre los diversos motivos que llevan a los hombres a decidirse por la operación de alargamiento de pene, uno de los más importantes guarda relación con la anestesia. Por motivos obvios, la anestesia general asusta a muchas personas. El miedo a no volver a despertarse genera una ansiedad que no se produce al tratar con una anestesia local, ni siquiera con la epidural.
La misma sí genera un cierto rechazo por el temor al dolor del pinchazo. Lo cierto es que dura unos pocos segundos y, acto seguido, el individuo pasa a no sentir absolutamente nada en todo el tronco inferior. Aun así, permanece despierto para ser consciente de lo que está sucediendo, aportándole tranquilidad el hecho de ver al equipo médico cien por cien concentrado en las correspondientes labores quirúrgicas.
El tiempo se pasa rápido, puesto que no hablamos de un período excesivo. Más bien todo lo contrario: algunas operaciones de alargamiento de pene concluyen en tan solo sesenta minutos. En los casos más duraderos, dos horas son necesarias para culminar el proceso, el cual no conlleva un postoperatorio complicado. Dicho aspecto también es tenido muy en cuenta por quienes desean alargar o incluso engrosar su miembro viril.
POSTOPERATORIO Y CICATRIZ
Ante un resultado tan bueno como es el de varios centímetros de ganancia, es comprensible que surjan preguntas sobre si las erecciones podrán tenerse sin dificultades de ningún tipo. Tras pasar un tiempo de postoperatorio, las dudas son despejadas por completo.
Basta con llevar a cabo una buena higiene de la zona, amén de realizar una serie de ejercicios que son explicados por el especialista con todo lujo de detalles. El vendaje solo dura un par de días y se extrae sin dificultades en la ducha del propio domicilio del paciente, ya que el alta se recibe en un día. Las curas no son dolorosas ni complicadas. Por otra parte, reincorporarse al trabajo no supone un quebradero de cabeza, especialmente si las labores profesionales no acarrean esfuerzo físico. Por ejemplo, un empleo de oficina es realizable al día siguiente.
En lo referente a la cicatriz, una Y invertida pasa desapercibida gracias al vello presente en la base del miembro. Su presencia viene dada por las futuras erecciones, las cuales requieren una mayor cantidad de piel independientemente de la ganancia de tamaño obtenida con la operación del alargamiento de pene.