La hermandad del Santo Crucifijo visitó la ciudad de Ronda para conocer la Semana Santa de la localidad malagueña. Con ocasión de la proclamación del Santo Padre Benedicto XVI como ‘Año de la Fe’ al curso que ahora comienza, el Consejo de Cofradías de Ronda ha dispuesto este fin de semana un besamanos magno, en el que catorce imágenes estaban expuestas a la veneración de los fieles en solemne ceremonia de besamanos. La hermandad de San Miguel, con su hermano mayor Luis Cruz de Sola al frente, cursó visita a todas y cada una de las sedes donde estaban expuestas las imágenes, y aprovechó para conocer el retablo con el Vía-Lucis mariano en el que está inspirado el acto que está organizando el Consejo Local de Hermandades y Cofradías de la ciudad, presidido por Pedro Pérez Rodríguez.
La hermandad conoció alguno de los tesoros más importantes de la localidad rondeña, como la iglesia donde descansa la patrona de la ciudad, Nuestra Señora de la Paz, o la Colegiata de la Encarnación, uno de los templos más importantes de la diócesis malagueña. De la misma manera, el grupo de casi cincuenta cofrades de San Miguel visitó algunos de los enclaves más característicos de Ronda, como el puente del Tajo, la parte antigua de la ciudad o la plaza de Toros, antes de regresar de nuevo a Jerez. La hermandad ya está trabajando en un intenso programa de actividades para estas fiestas navideñas, que incluirá la ya tradicional zambomba, así como una cena de Navidad en la propia casa de hermandad, fechas antes de comenzar con la apretada agenda cuaresmal, que este año se intensifica gracias a la colaboración de la cofradía en el Vía-Crucis de la Unión de Hermandades, prestando el paso del Santo Crucifijo a la hermandad de la Defensión para llevar a cabo el acto piadoso más importante de todas las fechas previas a la Semana Santa.