Nombres como Pandiani, Cavenaghi, Uche, Bruno, Javi Venta no son merecedores de estar en Segunda División, pero es lo que hay. El Villarreal puede estar por accidente en la división de plata del fútbol español, pero lo cierto es que esta tarde ha sido el Xerez el que parecía el equipo de mayor potencial, a pesar del empate a cero final. Sin embargo, los azulinos tienen la pólvora mojada, no tienen atino ninguno y por eso suman ya hasta cuatro partidos consecutivos sin marcar.

Se veía venir que Chapín iba a mostrar una de sus peores caras de la temporada (ni 5.000 espectadores). Cosas de los horarios, la televisión o el mal tiempo, pero lo cierto es que el frío escenario de hoy no presagiaba lo mejor para un Xerez que estaba obligado a lograr la victoria en un escenario gafe para los azulinos, donde se han perdido los dos últimos compromisos.

Esteban ya había avisado ayer que no era seguidor de revoluciones y tan solo introdujo los dos cambios obligados por las ausencias de Mendoza y Rueda, sancionados. Cámara y Bruno sustituyeron a los castigados, mientras que el Villarreal llegaba a Chapín sin jugadores claves como Cani o Mariño.

Los azulinos salieron menos dormidos que en anteriores ocasiones, pero no por ello sufrieron pronto el potencial ofensivo del segundo equipo que más remata de la categoría. A los cinco minutos los amarillos gozaron de unadoble ocasión clara de gol que repelió Chema. Primero remató Cavenaghi, pero el palo, y posteriormente Chema, evitaron el gol, aunque el rechace lo remata de nuevo Uche, que se vuelve a topar con el guardameta azulino en una jugada polémica, ya que los jugadores visitantes protestaban que el primer remate había sobrepasado la línea de gol. Solo un minuto después de nuevo Cavenaghi lo intenta desde lejos, aunque Chema vuelve a intervenir.

Tres zarpazos en apenas un minuto que sirvieron para despertar a un Xerez que pronto tuvo que hacer un cambio por la lesión muscular de José Mari. El dominio, sin embargo, seguía siendo del Villarreal, que salió a por los tres puntos desde el principio, quedándose el Xerez bien resguardado atrás, sin ánimo de romper líneas.

El Villarreal parecía tener las cosas muy claras y apenas dejaba jugar al Xerez, aunque los de Velázquez tampoco tenían el viento a su favor gracias al duro, pero sobre todo ordenado, juego defensivo de los azulinos. El partido se enfriaba, el ritmo cesaba, la afición reflexionaba (por no decir otra cosa) y el encuentro se convertía en un toma y daca sin ningún tipo de ‘punch’, ni por parte del Xerez ni del Villarreal. El derroche físico de la escuadra azulina hacía temer que las piernas en el maltrecho césped de Chapín comenzaran a sobrecargarse.

Enchufados

Lejos de dormirse, el Xerez entró muy enchufado en la segunda mitad. Esteban no quería que se repitiera la pájara del domingo ante el Sporting, aunque lo cierto es que el conjunto azulino tenía complicado hincarle el diente a un Villarreal muy ordenado. Pero los castellonenses subieron las líneas y ahí es donde el Xerez se siente más cómodo. Una buena jugada combinativa entre Porcar y Álvaro Rey acaba con un remate de Tato al palo cuando lo tenía todo a favor para marcar. Casi una hora tuvo que esperar el Xerez para rematar entre los tres palos, más de dos horas si sumamos el encuentro anterior.

La respuesta vino tres minutos después. Una buena jugada por banda derecha de Javi Venta la remata Musacchio al primer palo, aunque Chema repele como puede. Pero el Xerez estaba dispuesto a dar su otra cara y al minuto Marcos puede adelantar al Deportivo en el marcador, aunque el disparo del balear choca contra el travesaño tras tocar en un defensa del Villarreal.

Se estaba entonando el Xerez, merodeando el área del Villarreal sin el respeto de la primera mitad. Jugar con espacios la viene bien a los azulinos y Tato casi lo aprovecha al cogerle la espalda a la zaga y rematar con la punta de su bota un balón que no entra en la portería gracias a Íñiguez, que despeja en línea de gol. Pero el balón no quería entrar de ninguna manera. En estos minutos de locura Álvaro Rey, con una gran jugada por banda derecha, remata y su disparo lo saca con el pie el portero del Villarreal. Sin embargo, a falta de un cuarto de hora se da la jugada tonta del partido. Palatsi sale mal, deja el balón a Porcar que desde fuera del área, y sin guardameta, chuta el balón flojo y desviado.

El gol se resiste

Lo dicho, el balón no quería entrar hoy en la portería del Villarreal. Por ello, Esteban metió a Tati Maldonado, un jugador que suele ser efectivo en este tipo de partidos. Pocos minutos de todas formas iba a disfrutar el isleño, ya que el encuentro encaraba su recta final con un Villarreal más cómodo en el campo que el Xerez. Pero ni por asomo el Xerez podía meter ese gol tan deseado y que se hace desear desde hace ya cuatro partidos. Y no es que el Villarreal pusiera en demasiado peligro la meta de Chema, nada más lejos de la realidad. A los amarillos no les valía el reparto de puntos y se chocaban siempre con la defensa azulina, aunque Uche y Oriol tuvieron en el descuento la oportunidad de llevarse a Castellón los tres puntos.

Ficha técnica:
Xerez: Chema, Ruz, Bruno, Lucas Porcar, Álvaro Rey, Bouzón, Raúl Cámara, David Prieto, Marcos (Maldonado, 83′), José Mari (Tato, 11′) y Keita (Barber, 72′).
Villarreal:  Palatsi, javi Venta, Musacchio (Truyols, 71′), Pablo Iñiguez, Oriol, Bruno, Senna, Trigueros (Moi Gómez, 78′), Hernan Pérez, Uche y Cavenaghi (Pandiani, 60′).
Árbitro: Jaime Latre (Colegio Aragonés). Amonestó a Cavenaghi, Trigueros, Ruz, Cámara, Bruno, Tato y Hernán.
Incidencias: Partido disputado en el Municipal de Chapín ante 4.447 espectadores.