La tendencia de las últimas negociaciones colectivas se ha roto con el nuevo convenio del campo que se ha firmado este lunes y en el que, frente a la tónica general de recortes o congelaciones salariales, se incluyen mejoras en el pago a los jornaleros de la provincia de Cádiz.

Así lo pone de manifiesto Manuel García Mata, el abogado de la patronal Asaja Cádiz encargado de la negociación del documento con los representantes de los sindicatos CC OO y UGT. “Habrá un aumento de sueldo en los tres años en los que se aplicará”, en concreto un 0,5 por ciento para este año; un 0,6 por ciento para el siguiente y un 0,9 por ciento para 2015.

Para el letrado, el final de esta negociación ha dado como resultado un convenio “justo”, lo que quiere decir que “no ha dejado satisfechas a ninguna de las dos partes, ya que cada una ha tenido que ceder y se ha llegado a un equilibrio que es lo más adecuado en estos casos”.

En la misma línea se ha expresado el secretario general del Sindicato Provincial de Agroalimentaria de CCOO Cádiz, Luis Páez, que ha puesto de relieve que se han añadido importantes mejoras para los trabajadores del campo gaditano con estas subidas salariales progresivas.

Además, ha puesto de relieve que en el texto del convenio también se incluirá la actualización a la normativa vigente en relación a la igualdad de género, si bien el resto del documento se mantendrá prácticamente igual.

Por todo lo anterior, Páez ha mostrado su satisfacción por el consenso conseguido y añade que “dadas las circunstancias” se trata de “un buen acuerdo”, teniendo en cuenta que “la patronal dijo de entrada que no subiría nada”. Y es que desde CC OO han querido poner de relieve la intensidad de las negociaciones y la presión realizada tanto por el sindicato como por los trabajadores para darle la vuelta a una propuesta que en el inicio no planteaba ninguna mejora.

Y es que el acuerdo ha llegado más rápido de lo que se esperaba, tras apenas cuatro reuniones. Pero han sido encuentros de mucha dificultad y que “seguían además la estela de las negociaciones del convenio de la vid, que sí han sido duras, que se han alargado más de un año hasta que llegamos al Sercla y que nos habían preparado ya para este nuevo debate”, tal como admite García Mata.

Al final el acuerdo se rubricó el pasado lunes en las oficinas de Asaja en el Citea, en el Parque Tecnológico, para satisfacción de los entre 25.000 y 30.000 trabajadores del campo que verán mejorada su situación con este acuerdo -hay otros 10.000 más que se rigen por el convenio de la vid-. “Y también de los empresarios agrícolas, que desde enero de este año nos pedían rapidez en la negociación para poder cerrar cuanto antes los pagos a los empleados y ajustar los jornales”, insiste el abogado de Asaja.