Antes de las ocho de la tarde -hora oficial de la inauguración- ya había impacientes paseando por la Alameda Vieja. Igualmente, los 40 caseteros que conforman la Feria Gastronómica de la Vendimia en su segunda edición ya estaban preparados para recibir a los primeros clientes.
Al contrario de lo que ocurrió en la Pisa de la Uva, la apertura de la feria no registró protestas ni incidentes ya que tampoco se encontraban en el recinto las autoridades municipales. En este ambiente armonioso, la afluencia de público fue aumentando a medida que caía la tarde aunque lógicamente los grandes momentos de la feria se vivirán durante el fin de semana.
La actividad contará con un horario amplio hasta el domingo: desde la una del mediodía hasta la una de la madrugada. Las 40 casetas tienen una dimensión de 24 metros cuadrados (6×4). En total, unos 10.000 metros cuadrados, que ocupan restauradores jerezanos quienes ofrecerán sus tapas frías y calientes con un precio especial, muy asequible: tapa y bebida por 2’50 euros. Una decena de las casetas han sido reservadas para la venta de productos gastronómicos de la zona: chacinas, mariscos, queso y pastelería, entre otros.
La ambientación del recinto también es un aspecto destacado ya que se ha engalanado con guirnaldas y farolillos a fin de crear un ambiente de feria, así como la limpieza, seguridad y mantenimiento que correrá a cargo de la empresa organizadora. Asimismo cuenta con una zona reservada y diferenciada para las atracciones infantiles, así como megafonía unificada en todo el recinto que además ofrecerá actuaciones musicales durante la celebración del evento.