“Mi base es la cantera, he ayudado a muchos jóvenes valores a ser buenos futbolistas”. David Vidal, que mañana será presentado como nuevo entrenador del Xerez para las dos próximas temporadas, siempre ha manifestado su intención de tirar de la cantera en su nueva aventura en el banquillo azulino, siendo esta la que sirva de base para la plantilla de la próxima temporada.
Sin embargo, el técnico gallego se va a encontrar un pequeño problema; la cantera del Xerez se está quedando en cuadro. La falta de información dentro del club desde la llegada del Grupo Energy, asi como la incertidumbre que sigue existiendo desde el descenso a Segunda División B están causando que tanto técnicos como jugadores comiencen ya a buscar destino, en algunos casos, o incluso ya hayan firmado contrato con otros equipos.

De momento, el primero públicamente en decidir abandonar la entidad fue Dani Pendín, que en twitter dejó claro que “con Energy, no”. El argentino hacía de segundo entrenador en el equipo infantil del Xerez, pero no es el único. Raúl López, preparador físico del Xerez B hasta esta pasada temporada, también ha hecho las maletas y se marcha al Pobla, equipo filial del Nàstic de Tarragona. Junto a él también se marcha a Tarragona Iván Jiménez, extremo del filial, un filial que va a sufrir muchas ausencias.

Y es que Tali ya ha dicho adiós tras crecer en los escalafones inferiores del Xerez, firmando por el Chipiona. Mismo camino está a punto de coger el portero Manu, aunque dirección Cádiz o algún destino más lejano. No son los únicos, ya la lista de jugadores que han acabado contrato y se han cansado de esperar la llamada del Xerez es larga. Luis Lara, Franco Amoroso, que ha vuelto a Argentina, Parada, Barba, Kike Lobato o Luis Lara de momento no seguirán en el Xerez y buscan equipo, al igual que Joaqui, capitán del Xerez B, o Iván Ares, jugadores con los que Energy, a través de su comisión deportiva, tiene intención de hablar, aunque la espera se alarga y esa cantera con la que David Vidal quiere contar poco a poco se va quedando sin efectivos.