Si desde el mes de agosto no para de hablarse de los perjudicados por el ERE municipal, en estos días la noticia se ha vuelto aún más candente una vez que se les ha puesto rostro y nombre y han comenzado ya a recibir las cartas de despido y las correspodientes indemnizaciones. Desde ayer, la Delegación municipal de Recursos es un no parar de ir y venir de damnificados por el Expediente de Regulación de Empleo que acuden a recoger sus cheques como prueba fehaciente de que el proceso es irreversible y a partir del 12 de septiembre dejarán de prestar sus servicios en el Consistorio. Esta mañana se han vivido momentos de verdadera tensión cuando decenas de afectados han guardado cola y han ido siendo llamados a voz en grito, “como si de la carnicería se tratara”.
En este sentido la indignación era total, puesto que los presentes sentían que el proceso se está llevando a cabo con una falta de humanidad patente, sin tener en cuenta a los perjudicados ni la situación concreta de cada uno de ellos. “No hemos recibido ningún tipo de información -se quejaba una de las afectadas, Paqui Perdigones-, y Jerez tiene que saber cómo nos están echando y por qué. No sabemos qué criterios han seguido y para colmo nos están tratando como borregos. Si yo quiero llorar y desahogarme, al menos que nos dejen un despacho para eso y no nos liquiden aquí en medio”.
Paqui entró en la Delegación de Participación Ciudadana en 2001, y se lamenta de que hayan incluido su nombre en la lista ‘negra’ y no el de otros compañeros con bastante menos antigüedad. “Esto ha sido una caza de brujas”, asegura, argumentando que en su caso todo viene porque trabajó durante un tiempo para el grupo municipal socialista. En la misma línea se expresó Pilar Lebrón, otra de las perjudicadas, que confirmó que llegará hasta el final junto con Paqui en la batalla legal contra el Ayuntamiento.
“En mi expediente reza que soy soltera y no tengo hijos a mi cargo, cuando en realidad estoy casada y tengo dos hijos -declara-. Yo trabajo en el Ayuntamiento de El Torno y entre dos personas lo hacemos absolutamente todo; no sé qué va a ocurrir a partir de ahora, puesto que una sola no dará abasto”. Éstos son solo dos ejemplos de los 260 que conforman el ERE municipal, y que no hay que olvidar que continuará engordando con los más de 100 despedidos que se incluirán en el procedimiento de recortes de las empresas municipales.