La alcaldesa, María José García Pelayo, acompañada del presidente de la Asociación de Vecinos Palos Blancos, Jesús Palomo, y los miembros del gobierno Javier Durá, Lidia Menacho, María José Rúa y José Galvín, ha asistido esta mañana al homenaje póstumo que la Asociación de Vecinos Palos Blancos ha organizado en memoria de las “hermanas De la Quintana”, antiguas propietarias de la finca El Altillo.

El homenaje a las conocidas como “niñas de El Altillo” ha consistido en la instalación de un monolito en el Parque Escénico en reconocimiento a su humanidad, su amor a los animales y sobre todo por la labor conservacionista de la naturaleza que llevaron a cabo en la finca que fue de su propiedad.

La alcaldesa ha mostrado su satisfacción porque “los vecinos de esta agrupación vecinal, que habían manifestado un gran interés por organizar este acto han visto cumplido ya su deseo de celebrar un homenaje público a la trayectoria de  las hermanas De la Quintana”. María José García-Pelayo también ha destacado que el monolito que hoy se ha inaugurado “guarda una parte de la historia de la ciudad, y por tanto se trata de un merecido reconocimiento a una familia que siempre estuvo comprometida con el medio ambiente y con nuestra ciudad”.

Este monolito se ha instalado concretamente en uno de los rincones de la finca preferidos por las hermanas y que actualmente ocupa parte del Parque Escénico. El atril está revestido de una placa elaborada en cerámica con una foto de ellas en su infancia, que corresponde a la portada del libro ”El invierno de las Rosas’. En esta obra literaria se narra la vida de las ‘altillanas’ según las memorias recogidas por la escritora Purificación González de la Blanca, una de las personas que mejor conocieron la vida de las siete hermanas, junto a la también escritora y periodista Begoña García González-Gordon, autora del libro ‘Las niñas de El Altillo’.

Para que este homenaje sea toda una realidad, la Asociación de Vecinos Palos Blancos ha contado con la colaboración del Ayuntamiento de Jerez, que al margen de autorizar la instalación del monolito ha llevado a cabo también su colocación.

Con el acto celebrado esta mañana, los vecinos de esta zona de la ciudad verán cumplido su deseo de homenajear a las hermanas De la Quintana González, las mismas que levantaron, sin pretenderlo, la antigua leyenda de las siete hermanas, amantes de la naturaleza, que habitaron la antigua mansión de tipo victoriana que se levanta sobre la enorme finca de ‘El Altillo’, un antiguo y bello paraíso poblado de todo tipo de árboles. Las siete hermanas eran las hijas del matrimonio entre Cristóbal de la Quintana y Margarita González Gordon. Fueron Casilda, María, Josefa, Margara, Mercedes, Livia y Blanca, que fue la última superviviente de la familia que ocupó en usufructo la vieja mansión, aquella por donde no parece haber pasado el tiempo.