Íñigo Vélez no tendrá un buen recuerdo de esta temporada. El punta viene sufriendo un calvario con sus rodillas y ayer fue operado de su pierna izquierda, pues tenía roto el menisco. Pero durante la intervención los doctores comprobaron que su rodilla estaba peor de lo previsto, pues también tenía una lesión de cartílago. Esto quiere decir que el tiempo de recuperación será como mínimo el doble de lo previsto, por lo que el delantero vasco tendrá que pasar al menos cuatro meses de baja.