El sector vitivinícola español ha denunciado movimientos del ‘lobby’ de bebidas espirituosas para que se reduzca a la mitad el porcentaje de destilados de vino necesarios para la elaboración del brandy -especialmente el de la Denominación de Origen de Jerez- y se sustituya por alcoholes procedentes de la destilación de otros subproductos.
En un comunicado emitido hoy, Asaja (y su filial en el Marco de Jerez, Asevi), COAG, UPA, Cooperativas Agroalimentarias de España y la asociación de destiladores Adevin aseguran que el sector resultaría “gravísimamente perjudicado al ser el mayor proveedor de materia prima para la obtención de alcohol de uso de boca”, cuyo principal destino es la elaboración de brandy.
Según afirman, existen movimientos para cambiar la definición actual del producto a nivel comunitario y para permitir la creación de una nueva categoría (el ‘blend brandy’) en el que sería posible permitir el uso de hasta un 49 por ciento de otros alcoholes agrícolas de procedencia distinta a la uva.
Recuerdan que Francia habilitó años atrás un mecanismo fraudulento para permitir el uso de estos alcoholes industriales en la fabricación de bebidas alcohólicas, y que el sector vitivinícola español y la propia Administración española han logrado con gran esfuerzo que la Comisión Europea desautorice dicha práctica por ir contra la vigente reglamentación comunitaria y por suponer una ventaja competitiva sustentada por una práctica desleal con el resto del sector vitivinícola comunitario
De esta forma, productores, cooperativas y destiladores españolas consideran “inaceptable” la elaboración del brandy a través de la destilación de subproductos cuyos “únicos destinos reglamentarios actuales son los usos industriales y carburantes”.
Por ello, representantes del sector han solicitado por carta al Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente una reunión con el ministro, Miguel Arias Cañete, para analizar la situación.