Malabaristas, clowns, trapecistas… ‘Eoloh!’ tiene todos los ingredientes propios del circo pero adaptados a los recintos de los teatros. Ocho funciones cerrarán en el Villamarta la gira nacional de este exitoso espectáculo de producción netamente española que viene avalado con más de un 90% de ocupación. Las citas serán entre el 18 y el 21 de abril.

Para la directora del teatro, la programación de estas funciones responden a uno de los objetivos del coliseo: los proyectos singulares. “Sale uno transformado un poco en más niño gracias a la ilusión y a la magia”, ha explicado Isamay Benavente. Trece números de circo componen el montaje, que parte de las peripecias del pasaje de un avión del que forman parte los espectadores con el dios viento -de ahí su título-.De ahí a que una de las grandes sorpresas del montaje sea la recreación de una tormenta.

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Las cinco estaciones del baile flamenco from Festival de Jerez Televisión on Vimeo.

La pulida maquinaria de la XVII edición del Festival de Jerez ya ha echado a andar con la presentación de la gala inaugural en la bodega de San Ginés. Y lo hace nada más y nada menos que con la segunda producción propia del festival, ‘Las cinco estaciones’, dirigida por Francisco López.

Blanca del Rey, Marco Flores, Olga Pericet, Laura Rozalén y Mercedes Ruiz son los bailaores protagonistas del espectáculo, concebido como un viaje en el que no solo aparece el flamenco sino la vida misma. Sobre las tablas, una combinación de veteranía y juventud trabada por la experiencia del director de escena.

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Leonor Leal es una joven bailaora inquieta y lo demuestra, una vez más, con el estreno de ‘Naranja amarga’ el próximo día 25 de febrero en el Teatro Villamarta, dentro del XVII Festival de Jerez. En este espectáculo pone el acento en mostrar la paradoja entre las contradicciones, “al menos aparente, entre dos cosas o ideas”, según asegura la bailaora.

La paradoja de la contradicción aparente que formula Leonor Leal parte de una inquietud inicial: “¿Cómo algo que, a simple vista, parece dulce por su forma, color y aroma puede ser amargo?”. Su intento de resolver el enigma de esta transformación que se vislumbra en la naturaleza la conduce a “un viaje hacia el interior de la identidad femenina”. En esta introspección, utilizada como herramienta creativa, establece un curioso paralelismo entre la naranja y la forma de conducirse del ser humano por el mundo. “La naranja, representada como aquello que creemos que somos, pero que realmente no es todo lo que somos”, advierte. En cambio, lo amargo es concebido como el tránsito obligado para hermanar lo que creemos que somos con nuestra esencia verdadera.

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‘Lisístrata’, la comedia de Aristófenes, tiene más de 2.500 años pero sigue de vigente actualidad. “Es sorprendente que, después de tantos años, sigamos sintiéndonos tan identificados con los problemas de los atenienses”, señala Antonia Gómez, actriz y directora de este montaje. La compañía sevillana Tonia Tailor Company actualiza el clásico de Aristófanes que este sábado día 16 de febrero podrá verse en el Teatro Villamarta. Para ello, a la natural gracia del verso griego le añade la música compuesta por José Escalera.

Así las cosas, esta ‘Lisístrata’ adquiere la dimensión de comedia musical para narrar la divertida situación provocada por la abstinencia sexual impuesta por las mujeres en una Atenas enfrascada en una guerra fratricida con los espartanos que dura ya más de treinta años.

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El dúo formado por el flautista Juan Carlos Chornet (solista de la Orquesta Ciudad de Granada) y la arpista Daniela Iolkicheva (solista de la Real Orquesta Sinfónica de Sevilla) ofrecerá un concierto este jueves día 14 de febrero a las 20 horas en el Teatro Villamarta, dentro del ciclo ‘Suena Jerez’. Interpretarán obras de Bocccherini, Saint Saëns, Debussy, Rota, Naderman y Tulou, así como del compositor jerezano Julio Lozano Garijo del que se estrena su obra ‘Tríptico’.

En la primera parte de esta cita con la música clásica el dúo formado por Chornet e Iolkicheva interpretará la ‘Sonata en do mayor’ de Boccherini, el ‘Nocturno’ compuesto por Naderman y Tuluo, así como el ‘Tríptico’ del jerezano Julio Lozano Garijo. La segunda parte del concierto incluye la ‘Suite’ de Debussy, la ‘Fantasía Op. 124’ de Saint Saëns y la ‘Sonata’ compuesta por Nino Rota.

Juan Carlos Chornet es flauta solista de la Orquesta Ciudad de Granada desde 1991. Sin embargo, ha colaborado con otras formaciones musicales como la Orquesta de Valencia, la Filarmónica de Gran Canaria o la Real Sinfónica de Sevilla. Ha actuado en escenarios de prestigio como el Auditorio Nacional de Madrid, Maestranza de Sevilla y Palau de la Música de Valencia. Asimismo, es asiduo colaborador de formaciones camerísticas, además de actuar en solitario.

Por su parte, Daniela Iolkicheva ocupa plaza de solista de arpa en la Sinfónica de la RTV de Bulgaria en 1990. Un año más tarde se consolida como arpista principal de la Real Sinfónica de Sevilla.

Además de profesora de este instrumento, en su haber figura actuaciones y colaboraciones con formaciones como la Royal Philarmonia de Londres. Ha actuado en festivales de la importancia del Festival Internacional de Santander y el Festival de Música y Danza que se celebra en Granada.

Siete hombres forman parte de una divertida ‘Orquesta de señoritas’, un montaje que dirige Juan Carlos Pérez de la Fuente y podrá verse este viernes día 8 en el Teatro Villamarta. ‘Orquesta de señoritas’, un clásico contemporáneo de Jean Anouilh, se presenta ahora como una comedia musical ambientada en el Madrid de la postguerra.

Esos siete hombres sobre el escenario son Juan Ribó, Víctor Ullate Roche, Juan Carlos Naya, Francisco Rojas, Emilio Gavira, Luis Perezagua y Zorión Eguileor. “Es una comedia musical divertida, que empuja hacia lo positivo”, señala Juan Ribó. “Estoy en un terreno que no he tocado nunca, nunca me he subido a un escenario con un tacón de 18 centímetros. Luego está ese pudor añadido de sacar la parte femenina, que todos tenemos. Para mí es un reto muy gordo”, añade.

‘Orquesta de señoritas’ sitúa al espectador en el Madrid de la postguerra y en un local –‘El balcón de España y Portugal’- donde se representan espectáculos de variedades en formato de revista. Allí toca una curiosa orquesta de señoritas (que, en realidad, son hombres) dirigida por Doña Hortensia, papel que interpreta Juan Ribó. Utilizando la música como hilo conductor, se deja entrever la vida de estas chicas: sus amores, sus ilusiones y decepciones. Todo ello da como resultado un evocador homenaje al mal llamado ‘género frívolo’ (las varietés).

“El lenguaje tiene un humor casi negro, con un contenido trágico en medio de una atmósfera decadente, pero llena de comprensión y ternura hacia esta ‘Orquesta de señoritas’”, apunta Juan Carlos Pérez de la Fuente, director de este montaje. “La obra funciona con hombres, no tanto por el patetismo, sino para subrayar la confusión y el caos en que viven estos hombres, en un momento en el que las supervivientes son las mujeres y los hombres están hechos una piltrafa”, sostiene.

La versión de Pérez de la Fuente pone el acento en ese Madrid canalla con las cartillas de racionamiento y establecimientos como Chicote, “una ciudad marcada por una doble mirada, la del hambre y la juerga”, señala el director. Sobre el escenario, los actores hacen también de orquesta, pues con onomatopeyas imitan con sus voces el sonido de los instrumentos.

Jean Anouilh, uno de los dramaturgos franceses más importantes del siglo XX, escribió en 1952 esta obra. Su estreno, bajo su dirección, tuvo lugar diez años más tarde en la Comedie des Champs-Elysées. Cincuenta años después de su estreno, Juan Carlos Pérez de la Fuente retoma este clásico contemporáneo.

El Teatro Villamarta y los Museos de La Atalaya van a acoger este verano el I Encuentro Internacional de Coreografía y Danza de Jerez, una apuesta ambiciosa compuesta por cuatro cursos impartidos por maestros para alumnos con un nivel medio-alto. Se compone de un programa de masters class con la compañía de Sharon Fridman (con él y Arthur Bernard), Lola Greco, Rubén Olmo y Jose Carlos Martínez, todo “un lujo” para la ciudad.

“Este encuentro es importantísimo para que diferentes disciplinas de la danza se junten y enriquezcan”, asegura el bailarín y coreógrafo Rubén Olmo. Los cursos se distribuirán de forma que los interesados puedan acudir a las cuatro propuestas formativas, ya sea como alumnos activos o como oyentes.

Lola Greco dedicará su curso a la danza española, José Carlos Martínez -actual director de la Compañía Nacional de Danza- hará lo propio con el ballet clásico, Rubén Olmo enseñará cómo diseñar coreografías de danza estilizada-flamenco y, por último, la compañía de Sharon Fridman impartirá clases de danza contemporánea, concretamente de la conocida como Técnica Contact, poco habitual en España.

“Lo fundamental es que los maestros se encuentren para que los alumnos puedan hacerlo también”, asegura la presidenta de la Asociación Andaluza de Empresarios del Flamenco, Pepa Caballero. “Jerez tiene el festival y los cursos más importantes del flamenco y este encuentro no tiene nada que ver porque se centrarán más en el diseño de las coreografías, la interpretación y el carácter en vez de en la ejecución”, añadió.

“Jerez es la ciudad perfecta”

¿Por qué unos cursos de experto de este nivel en Jerez? Porque, a juicio de Caballero, “Jerez es la ciudad perfecta: lo suficientemente grande para dar respuesta a un encuentro internacional y lo suficientemente pequeña para la intimidad que necesita esta actividad, para que cuando los alumnos salgan de clase sigan viviendo el encuentro”.

La elección del mes de julio (del 11 al 18) para la cita responde a dos motivos: la necesidad de desestacionalizar el turismo con el fomento de actividades en otras fechas y el fin del curso académico en los conservatorios de danza. “Es un encuentro de futuro”, ha augurado el delegado de Cultura, Turismo y Fiestas, Antonio Real, que estuvo arropado por su compañero Antonio Montero.

El programa formativo se completa con un calendario paralelo de espectáculos de danza en el Teatro Villamarta que aún se está cerrando. “Es un proyecto precioso”, ha asegurado la directora del coliseo, Isamay Benavente, que ha confesado que es “un honor que cuenten con nuestro equipo para plantar la semilla de este encuentro”.

El precio de los cursos es de 350 euros para los alumnos activos y de 100 para los oyentes. Hay descuentos para los que realicen más de un curso. El plazo de inscripción -hay solamente 30 plazas activas por curso- se abre el 1 de febrero y se puede obtener más información en la web www.encuentrodedanza.es. Los alumnos deben ser profesionales o estudiantes de alto nivel con experiencia por lo que hay que presentar el currículum para ser admitidos en el programa.

La copla parece haber tomado el color ‘Azabache’, a juzgar por la respuesta del público a un espectáculo que conmemora los 20 años desde que se presentara en la Expo de Sevilla con Rocío Jurado, Nati Mistral, María Vidal, Imperio Argentina y Juanita Reina como protagonistas. Ahora los artistas son otros. Pasión Vega, Pastora Soler, Diana Navarro y Manuel Lombo son las nuevas caras de una interesante propuesta que rinde homenaje a la copla y que podrá verse en el Teatro Villamarta este sábado día 19 y el domingo 20 de enero.

Para José Miguel Évora, director musical de este remozado ‘Azabache’, hay en España “más artistas” que podrían participar en este espectáculo. Sin embargo, a su juicio, los cuatro elegidos “son los mejores”, aunque “cada uno con su personalidad propia”. Añade Évora que ‘Azabache’ marcó una época y ha dejado huella en la memoria del público. “Es algo de lo que nos sentimos orgullosos porque todas las canciones son obras maestras de tres minutos”, explica.

En el repertorio que ofrecerá Pasión Vega se incluyen temas como ‘Suspiros de España’, ‘Ojos verdes’, ‘Tatuaje’, ‘Francisco Alegre’ y ‘El día que nací yo’. Por su parte, Pastora Soler interpretará ‘La Lola se va a los puertos’, ‘Triniá’, ‘Cinco farolas’, ‘El clavel y mañana sale’, mientras que Diana Navarro entonará ‘Carmen de España’, ‘La violetera’ y ‘María de la O’, entre otros temas. El contrapunto masculino lo pone Manuel Lombo, que cantará ‘Señorío’, ‘Ruedas de molino’ o ‘Capote de grana y oro’. Todo ello bajo los sones de la Orquesta Sinfónica del Aljarafe.

“Se trata de mirar al pasado, recordando todo lo que se interpretó entonces, pero con un toque actual”, precisa el director musical. “La idea es emocionar al público y recordar, desde el respeto, a todos esos artistas que formaron parte de aquel espectáculo irrepetible”, apunta Diana Navarro.  Pastora Soler cree que aquel ‘Azabache’ “fue como el vestir a la copla con las mejores galas en un momento en el que políticamente no estaba bien vista”.

Inquietud profesional

La cantante de Coria del Río confiesa que se apuntó al proyecto en cuanto “me dijeron quiénes iban a ser mis compañeros”. Pasión Vega dio una respuesta afirmativa al saber que podría compaginar su participación con otros compromisos profesionales. “Nos une la inquietud profesional, no nos gusta conformarnos con lo que hacemos”, apunta la malagueña que vuelve por sus primitivos registros de la copla.

“No pensé decir que no en ningún momento. Dije que sí casi sin saber los detalles. Conozco a las tres desde hace mucho tiempo. Nos llevamos muy bien”, confiesa Manuel Lombo. Se da la circunstancia de que Lombo ha estado recientemente en el Teatro Villamarta por su participación en ‘Que suenen con alegría’ a principios de diciembre. El cantante vuelve “encantado” a Jerez. “Me encanta este teatro y el público me trata muy bien”. En cualquier caso, rehúye de las comparaciones con el anterior ‘Azabache’. “No tiene nada que ver”, aclara.

Pese a ser un espectáculo que dura casi tres horas, “en ningún momento te aburres”,  sostiene Pastora Soler, ya que existe una buena dinámica en la concepción de este nuevo montaje.

‘Azabache’ inicia en Jerez su segunda gira, tras su estreno el pasado verano. Este musical de copla y canción española visitará a continuación Granada y El Ejido. En febrero pisará el escenario del Teatro Real de Madrid, en marzo Barcelona y en abril Valencia, entre otras ciudades de nuestro país. Entre otras cosas, su éxito radica en haber reunido a cuatro grandes voces de la copla del siglo XXI.

‘Yo soy don Quijote de la Mancha’ “rescata el referente moral y ético que es este individuo quien, antes de estar loco, se enfrenta a cualquier riesgo con tal de defender unos principios”, señala José Sacristán, protagonista de este montaje que podrá verse en el Teatro Villamarta este sábado día 12 de enero.

A Sacristán –en el papel del insigne caballero de la triste figura- le acompañarán en el escenario Fernando Soto (como Sancho) y Almudena Ramos (que encarna a Sanchica, hija de Sancho), al que se suma el violonchelo de José Luis López. La obra dirigida por Luis Bermejo está basada en el texto de Miguel de Cervantes, pero cuenta con la dramaturgia de José Ramón Fernández, lo que permite que el público pueda contemplar desde una nueva perspectiva –más actualizada e incluso cómica- las aventuras del célebre personaje cervantino.

José Sacristán se reencuentra con el Quijote, tras su interpretación en el aplaudido musical que invadió la Gran Vía madrileña a finales de los años 90. Sin embargo, en esta ocasión, encarna a un personaje desde la visión teatral de José Ramón Fernández. “Hemos intentado que este mito que todos tenemos en el cabeza siga formando parte de nuestra vida y nuestros sentimientos a través de los actores”, precisa el autor de la dramaturgia. Con el objetivo de construir “un Quijote esencial”, se han conservado algunos pasajes bien conocidos por el gran público, pero se añaden otros que no pertenecen a la obra.

Esta novedad, en opinión de Sacristán, constituye todo un acierto. “José Ramón ha creado un personaje, Sanchica, que tiene la virtud de ser un personaje bisagra que se dirige al público con textos de Pasolini, Galdós, Machado o Unamuno. Se convierte en una especie de voz en off que va situando al espectador, de forma que nos permita mostrarle aspectos determinados del Quijote”.

Contra la opinión general, Sacristán no duda en asegurar que entre los dos personajes principales –Quijote y Sancho- no hay antagonismo. “Al final de la novela hay una aproximación, un aquijotamiento de Sancho. Toma de él muchos modos de ver la vida e incluso de formas de decir. Yo mismo soy sanchesco de origen y quijotesco por aspiración”.

Personaje universal

Que el Quijote es un personaje universal no tiene ninguna duda el actor y reconoce que, afortunadamente, aún quedan personas con este perfil en el mundo. “Frente a lo peor que surge con la crisis aparecen actitudes y gestos. Sería para volar el planeta si ya no hubiera personas capaces de defender sus principios”, asegura. Todos los personajes dejan huella en los actores y, en este caso, la enseñanza clarividente es “no rendirme”. “Si te miras por la mañana en el espejo, te reconoces y te guardas el respeto debido, no has de rendirte”, agrega.

Para el actor Fernando Soto (que interpreta a Sancho) este montaje abunda en el tema de “la bondad en estos tiempos tan sucios en los que parece que sólo se ven cosas malas”. Su compañera de reparto Almudena Ramos (Sanchica) añade que se pone especial énfasis en que el quijotismo como “ese espíritu que potencialmente está en todos y que puede desarrollarse o no”.

La puesta en escena de ‘Yo soy don Quijote de la Mancha’ recurre al teatro dentro del teatro, un juego dramático que permite a los personajes, a los que acompaña el violonchelista José Luis López, entrar y salir de la realidad y la ficción, haciendo partícipes a los espectadores de todo el proceso de elaboración de la obra.

Año y medio de intenso trabajo con el texto ha llevado al equipo ultimar esta nueva visión del Quijote que, según Luis Bermejo, su director, destila “mucho humor”. A su juicio, el protagonista “no ha perdido el juicio, sino que vive con intensidad lo que otros experimentamos débilmente”.

‘Yo soy don Quijote de la Mancha’ fue estrenado en la última edición del Festival de Almagro y, posteriormente, hizo su presentación en Madrid en el Teatro Español.

La Orquesta Álvarez Beigbeder y el Coro del Teatro Villamarta ponen fin mañana jueves día 20 de diciembre a las 20 horas al ciclo de Navidad de la programación de otoño del coliseo jerezano. Ambas formaciones se unen para protagonizar un concierto con obras de Häendel y Mozart.

Bajo la dirección musical de José Ramón Hernández Bellido, este concierto de Navidad se iniciará con la pieza ‘Llegada de la Reina de Saba’ de la ópera ‘Salomón’, cuya autoría corresponde a G.F. Häendel. De este mismo autor sonarán también los compases de ‘Música acuática Suite núm. 2’. Antes de finalizar la primera parte tendrá lugar la ‘Sinfonía núm. 9’ de W.A. Mozart.

Tras el descanso, tanto la Orquesta Álvarez Beigbeder como el Coro del Teatro Villamarta interpretarán una selección de temas del Oratorio ‘El Mesías’ de G.F. Händel, una de las obras más escuchadas con motivo de estas fiestas.

El Ciclo Navidad en el Villamarta comenzó el pasado día 1 de diciembre con la tradicional zambomba jerezana a cargo de la Hermandad de la Yedra. A esta propuesta siguió los días 6 y 7 el espectáculo ‘¡Que suenen con alegría!’ (con las voces tan distintas de Ismael Jordi, Manuel Lombo y Jesús Méndez) y continuó el día 14 con la ‘Navidad flamenca’ organizada por la Federación Local de Peñas Flamencas