Después de un año y medio de agonía desde que se declarara el concurso de acreedores, y de estar desde entonces a la espera de acontecimientos sobre el futuro de la radio y televisión locales, la plantilla de Onda Jerez podría encarar estos días la fase final de este proceso que comenzó tras la decisión del gobierno municipal del PP de incluir esta medida en su plan de ajuste.
No en vano, queda justo una semana antes de la reunión que hay prevista de la junta de acreedores de Jecomusa (la sociedad que gestiona la radio y televisión municipales). Hay que recordar que el Juzgado de lo Mercantil de Cádiz decidió en abril volver a posponer esta junta general de acreedores de la sociedad. Así, la cita entre la entidad y sus acreedores (los más importantes son Hacienda y Seguridad Social) quedó fijada para el próximo 24 de junio.
Todas las vistas están puestas en esa reunión trascendental para el futuro de Onda Jerez, pero en paralelo se han activado otros procesos como la propuesta de un posible Expediente de Regulación de Empleo de carácter temporal (ERTE) de la que ha tenido conocimiento este medio y que habría puesto sobre la mesa una parte del comité de empresa del ente.
El posible ERTE, que según diversas fuentes contaría con el visto bueno del gobierno de María José García-Pelayo, implicaría que de forma rotatoria durante dos años la plantilla dejaría de trabajar y cobraría durante unos meses -probablemente seis- sus prestaciones por desempleo, al tiempo que se alargaría la vida de la radio y la televisión. El plan de ahorro también conllevaría una eliminación de las productividades y del plus de asistencia, así como una reducción en un 20% de las cuantías del resto de complementos.
Ante esta posibilidad -que no cuenta con el apoyo unánime de todos los representantes sindicales- desde la plantilla ya han surgido opiniones para todos los gustos, ya que algunos apuntan que puede servir para alargar la situación en beneficio de los trabajadores evitando un cierre o liquidación, o un ERE extintivo que afectaría a más de la mitad del personal. Por otro lado se apunta que puede ser una medida “envenenada” que no afectará en nada al concurso ni servirá para mantener abierta o sanear Onda Jerez, que podría rebajar las cotizaciones y posibles futuras indemnizaciones de los trabajadores en caso de despido y que incluso les puede perjudicar de cara a futuras demandas.
Una asamblea de trabajadores del ente público decidirá si esta posibilidad se pone sobre la mesa y se presenta de forma oficial al gobierno local.