Las enfermedades fúngicas son una de las principales razones por las que la calidad de la uva puede verse mermada. Una de las más conocidas es la botritis, principalmente por su alta capacidad de deterioro del fruto, pero también de empeoramiento de las características de los mostos. Para hacer frente a este problema, la delegación española de SIPCAM ha viajado hasta la Toscana con el propósito de descubrir las últimas técnicas agrónomas que el país vecino utiliza para combatir esta amenaza natural. Leer noticia completa