La Copa se le atragantó al Xerez. Y son ya cuatro partidos consecutivos perdidos en la nueva era Esteban Vigo que encienden todas las alarmas. El entrenador xerecista probó para la competición del KO con un equipo prácticamente renovado en todas sus líneas. Tan solo repitieron con respecto al último partido ante Real Madrid Castilla Rafa García y Prieto. Amargo sorbo para los menos habituales, muchos debutaban con la elástica azulina (después hablaré de las camisetas), y dejan un mal sabor de boca en su estreno.
Muchos pensarán, y personalmente así lo creo, que se puede ver la copa medio llena, medio vacía. La eliminación en Copa del Rey puede ser lo mejor que haya pasado para centrarnos solo y exclusivamente en Liga. Teniendo en cuenta que necesitamos despegar y que ocupamos zona de descenso, es bueno no jugar con fuego. Equipos como el Tenerife o el Cartagena que empezaron ahí abajo la competición ahora son carne de Segunda B. Quiero pensar que el equipo no está ni al 70 por ciento, que sigue Esteban Vigo encajando las piezas y que muchos se tienen que adaptar tras su reciente incorporación. Con todo, confío plenamente en el preparador de Vélez para dar el giro esperado por todos a la situación.
En lo negativo a la hora de valorar lo que deja la eliminación copera podemos destacar dos aspectos. Muchos futbolistas que van a jugar poco en Liga están faltos de minutos y estos partidos eran una oportunidad para ellos de coger ritmo y reivindicarse. Quedarnos sin Copa supone también menos ingresos, soñando en que nos hubiera tocado ‘un grande’. Tal y como está la economía, todo lo que sea ingresar bienvenido sea.
Pero la realidad es otra, y bien distinta por cierto. Ese sueño tendrá que esperar hasta el año que viene y hay que centrarse en la Liga. Por cierto, y hablando ya de otro asunto. ¿Con qué camisetas jugará el Xerez este sábado?
Está muy bien que ayer estrenara la tercera equipación por falta de suministro y los problemas con Cejudo, pero personalmente daba la sensación de estar jugando en Chapín el vecino Cádiz y cualquier otro equipo nacional. Qué mal sienta el blanco con el negro y esas rayas… Y si se pierde mucho peor. Mal trago, amargo sorbo copero. Hasta la próxima, seguro será más dulce…