Tiene las cervicales “hechas polvo” y no es para menos. La dependienta del estanco situado en los soportales San Eloy de Icovesa ha resultado herida tras el atraco perpetrado por dos delincuentes en el local. Como ha contado el propietario del negocio a este medio, Julián Lasanta, los hechos se produjeron en la tarde del jueves y todo parece indicar que los individuos tenían vigilado el estanco y esperaron a que la mujer se quedara sola para actuar. Entonces, entraron en la expendeduría y pidieron dos paquetes de tabaco, de diferentes marcas cada uno.
La trabajadora sospechó al momento de ellos pero no tuvo capacidad de reacción, puesto que intentaron abrir el mostrador con tal violencia que lo desencajaron y se precipitaron sobre ella, asestándole varios golpes. La mujer, de 45 años, acabó tirada en el suelo mientras los asaltantes se hacían con el botín de la caja, cifrado en 2.300 euros. “Ella está muya afectada y lo que quiere es olvidar el tema cuanto antes -explica Julián-. Le dieron por todo el cuerpo sobre todo en la cabeza, y tiene las cervicales bastante dañadas”.
Se da la terrible circunstancia, además, de que el antiguo propietario del estanco murió atropellado justo enfrente de éste hace un par de años, por lo que la mala suerte parece haberse cebado con el negocio. La buena noticia es que la Policía está tras la pista de los delincuentes, que han sido identificados gracias a las huellas obtenidas en el lugar y la descripción de la testigo, pues iban con la cara descubierta en el momento de perpetrar el golpe.