Manu Redondo se ha convertido de momento en protagonista dentro del ya de por sí lamentable estado institucional de un Xerez que vive, o mejor dicho sobrevive, sus últimos días. El lateral sevillano, que recaló en la entidad azulina tras estar sin equipo y a lo largo de la temporada renovó contrato, ha denunciado al club por impagos, ya que existe una diferencia salarial entre lo que debía haber cobrado y lo que el club apunta que debe cobrar.
La denuncia ya ha llegado a la AFE, aunque la directiva azulina, encabezada por Rafael Mateos, ya se ha puesto manos a la obra para que el jugador retire la denuncia. Redondo tiene una oferta del fútbol tailandés y quiere cerrar ya su nuevo contrato, por lo que estaría dispuesto a negociar para obtener la carta de libertad. En eso está trabajando el propio Mateos, quien dejó el asunto semanas atrás, como ya adelantó REPORTEROS JEREZ, en manos de Miguel Ángel Rondán.
De momento las horas pasan y no se ha llegado a ningún acuerdo, aunque el mandatario espera arreglar la situación con el sevillano este lunes. El problema recae en que Redondo, que cobraría los meses de impagos a través de la AFE, va a recibir menos de lo acordado, ya que así lo ha remitido el propio Xerez a la Liga.
Las partes estaban a punto de llegar a un acuerdo, aunque, según ha informado Diario de Jerez, la entrada de Francisco Javier López Ballesteros, ya como exdirector general del club, torpedearon las negociaciones iniciadas por Miguel Ángel Rondán, por lo que la denuncia, de momento, se mantendría y eso supondría el descenso administrativo del Xerez a Tercera División, hecho que se consumaría a finales de julio.