Llega el mes de julio y con él el inicio oficial de la temporada de Rebajas de verano. En una campaña marcada por la crisis, han sido los parques comerciales de Jerez, Área Sur y Luz Shopping, los que han ganado la partida a los comercios del centro de Jerez, que en estas primeras horas no han vivido demasiadas concentraciones de consumidores.

En contraposición, han sido los parques comerciales los que se han levado el gato al agua en este estreno de la temporada de Rebajas. Tanto Área Sur como Luz Shopping no han cesado de recibir visitantes llegados tanto de Jerez como de otros puntos de la provincia en un inicio de Rebajas marcado por el bajo consumo.

El año pasado se produjo un cierto punto de inflexión, ya que tras varios veranos de pérdidas que llegaron a suponer hasta un 50% menos de ventas, llegó el milagro y los comerciantes del centro lograron mantenerse e incluso hacer algo de caja. Así lo ha confirmado el presidente de Acoje, Fernando García, que confía en continuar en esta línea ofreciendo “unas rebajas que son reales”, como marca diferenciadora de la casa. “Si este año tenemos pérdidas del 5% o el 6% nos podemos considerar dichosos -apunta-. Nuestras rebajas son rebajas de verdad, que van desde el 30% hasta el 60% de descuento, y aunque todo ha empeorado nosotros tenemos que hacer dinero para la campaña de invierno”.

A ello se une que la picaresca de otros años en torno a las grandes superficies y las rebajas encubiertas “está muy controlada”, por lo que a pesar de que se haya liberalizado la fecha de inicio de temporada de saldos García espera que la competencia se desarrolle de una manera limpia. El presidente de Asunico, Manuel García, se ha mostrado algo más pesimista reconociendo que “la situación no ha mejorado, y hasta que no se genere empleo y el consumo vuelva a su cauce habrá poco que hacer”. No obstante, ha coincidido con el representante del otro colectivo al aseverar que “lo importante es no acumular pérdidas, porque prácticamente ganancias no hay”. Manuel García ha puesto el acento en la competencia desleal que está sufriendo el pequeño comercio, pero no por parte de los grandes sino de aquellos que carecen de licencia, no pagan impuestos y sin embargo campan a sus anchas con precios irrisorios.