Llegó el momento soñado por todos los cofrades del Perdón, ese en el que las puertas de SantaAna se abran, como se abrían hasta hace poco cada Madrugada de Viernes Santo, para llevar al Santísimo Cristo del Perdón al corazón de la ciudad. Antes eran La Plata, ahora es la Ermita de Guía, en la zona sur de la ciudad. Antes, era en silencio, hoy lo hará, por primera vez en su historia, con cornetas y tambores. Antes, era con el Perpetuo Socorro en el paso de palio, hoy luce el crucificado sólo, ya que la dolorosa tiene su propio altar envuelto en bordados de Fernando Calderón y orfebrería de De los Ríos.

Todo ha cambiado… salvo Él. Un Cristo que es patrimonio de nuestra Semana Santa, una hermandad que desde que nació, ya era distinta al resto, y que hoy presume de esa diferencia que les hace singulares, especiales, diferentes… Saldrá la hermandad del Perdón de la iglesia de Santa Ana cuando el reloj marque las seis de la tarde, y lo hará buscando otros momentos, otros hitos de su historia. Cincuenta años cumple hoy la hermandad del Perdón, y con esta procesión extraordinaria se busca que sean no cincuenta, sino muchos años más.

La corporación será despedida por la hermandad de la Candelaria minutos antes de la salida, que será a las seis en punto de la tarde. No hay previsiones meteorológicas adversas salvo algo de frío cuando el sol descanse sobre la campiña, por lo que los sones de la banda de cornetas y tambores del Sol, de Sevilla, resonarán con esplendor tras el paso de Cristo. Será la primera vez en la historia que el crucificado no procesione en silencio, situación que ya se repetirá el próximo Domingo de Ramos. El capataz será el mismo que comanda los destinos del Señor el Domingo de Ramos, Manuel Jesús Tristán, y se espera un amplio cortejo de hermanos acompañando con luz al crucificado de Pinto.

Luz que será también distinta en el paso, ya que la corporación ha sustituido los tradicionales hachones del misterio de Antonio Martín, por candelabros de guardabrisas. El cortejo seguirá un itinerario que les llevará por la plaza de la Constitución, Asta, Barreras, plaza de Santiago, Ancha, Porvera, Puerta de Sevilla, plaza Rafael Rivero, Tornería, plaza Santo Ángel, plaza Plateros, Padre Luis Bellido, plaza de la Asunción, José Luís Díez, Santa Isabel, Visitación, Reducto, Cruces, plaza del Arroyo, Calzada del Arroyo, Puerta de Rota y Ermita de Guía. En la sede del Ayuntamiento habrá una recepción oficial del Ayuntamiento a la hermandad, y el cortejo entrará con su titular en la Catedral para realizar unas meditaciones. El monte del paso está confeccionado con clavel rojo, con friso de iris morado.

Todo preparado, por tanto. Todo listo para que, a las seis, el Perdón sea, una vez más, el Cristo más especial de la Semana Santa.