Otro de los pasos que son buscados, perseguidos, admirados en Jerez, es el de la Paz en su Mayor Aflicción. Capitaneado por Isaac Núñez, la cofradía de la Albarizuela arrastró devotos hasta la mismísima calle Arcos, donde se recogió al filo de la una de la mañana.
Con un varal roto, que propició que no se pudieran disfrutar las espectaculares levantás de este paso de palio, la Paz anduvo coqueta durante todo su recorrido, sin la cera rizada de los laterales, lo que propició una visión más clara de esta bella dolorosa, que es el joyero de la hermandad de la Coronación.