Carlos Orúe estaba satisfecho tras el 0-2 que permitía volver a la senda del triunfo al Xerez Deportivo. El preparador jerezano afirmaba que su conjunto había “aprovechado el cansancio del Cañorrera, ya que no ha podido presionar tanto como en la primera parte. Ya sabíamos que seríamos jueces de la zona alta de la competición durante el último tercio de campeonato. Lo que sí queríamos era no beneficiar a ninguno e intentar ganar a los cinco de arriba”.
Aunque el triunfo no fue sencillo, Orúe resaltaba que “otra cosa hubiera sido que ellos se hubieran adelantado. En ese caso se habrían ido haciendo fuertes y seguro que era más complicado”. Y sin duda, lo peor de la tarde fue la lesión de Pendín, que se rompió al lograr el 0-2: “Dani tiene mucho amor propio, quiere estar ahí y quiere ayudar. Está dando un gran ejemplo a los jóvenes porque está demostrando como se sufre en el campo”.
Por otra parte, Juan José Misa, entrenador del Cañorrera apuntaba que habían “intentado neutralizar y combatir todas las acciones del adversario. En la primera parte perdimos un poco el centro del campo, pero luego metimos ahí más gente para cortar los pases por el centro. Luego hemos estado un pocos cohibidos tras el penalti”.