Es sorprendente como un local, en plena crisis, y fruto de la iniciativa privada, sepa sortearla y arriesgar a programar un festival off con una calidad excepcional. La Guarida del Ángel ha tenido a bien llevar a cabo este flagrante proyecto programando artistas de primer nivel.
Hace unos años, pudimos escuchar a Manuel de los Santos Pastor ‘Agujetas’ en el Teatro Villamarta. La noche del viernes, apenas 250 privilegiados tuvieron la suerte de escuchar al cantaor durante más de hora y media. Con la guitarra de Domingo Rubichi, el último ‘mohicano’ del cante se deshizo en cantes. No precisó un repertorio amplio para que su entregado público ovacionara cada tercio. Agujetas presume de cantar solo cantes gitanos y no necesita nada más que 4 cantes para plantarse ante quien sea. Solea, seguiriyas, tonás y fandangos. Y punto. Este anárquico cantaor deja de lado todo aquello que nunca formó parte de sus vivencias para hacer lo que sabe.
A excepción de las alegrías que cantó a Kanaco y las bulerias, Agujetas alternó los cantes ya nombrados. En honor a la verdad no arriesgó en ninguno de ellos. Cantes de preparación en las soleares, repertorio casi exclusivo de Manuel Torre. Mismo discurso cantaor en las seguiriyas; Manuel Torre y Tío José de Paula. Sin añadidos. Y en fandangos, sus ya clásicos con las letras de siempre, y como no, recuerdo a Manuel Torre de nuevo.
La alternancia de unos estilos a otros nos hacia intuir que dejaría lo bueno para el final. Pero es que en Manuel todo es bueno. No hay peros. Y aunque empezó como acabó, sin arriesgar en los tercios, Manuel es el último eslabón cantaor que ha sido espectador directo de los antepasados del cante.
Larga vida a Manuel!!