Carlos Orúe explicaba al término del último encuentro de la temporada que se vivió “un encuentro de guante blanco en el que se entendía que nuestra superioridad tenía que ser grande y si en el primer minuto hacemos gol, todo se pone de cara y es mucho más fácil. Pedimos siempre máxima concentración. Algunas veces no nos ha salido bien, pero ante el San Roque sí y conforme han ido pasando los minutos han ido cayendo los goles. Además hemos tenido a un Barba muy acertado y con mucha ambición”.
Después de los cinco goles de Barba, era imposible no destacar la figura del centrocampista, por lo que el técnico explicaba que “lleva muchos partidos bien y no sólo por su racha goleadora. Sobre todo porque lleva un fin de temporada muy enchufado, jugando muy alegre y haciendo las cosas que llevamos mucho tiempo pidiéndole”.
Por último, y ya haciendo un pequeño balance del gran año realizado por el equipo, Carlos afirmaba que “igual que nosotros estamos orgullosos de la afición, también ellos tienen que estarlo de sus futbolistas”.
Por su parte, José Luis Perea, entrenador del Atlético San Roque declaraba que “ha sido un partido en el que el Xerez ha demostrado su superioridad. Nosotros hemos jugado muy relajados porque ya habíamos logrado nuestro objetivo y lo cierto es que ante este Xerez es imposible hacer nada. El gol tempranero también ha influido mucho porque nos hemos tenido que abrir un poco más”.