Con la festividad del Dulce Nombre de María, la hermandad de la Buena Muerte se vuelca, un año más, en festejar la advocación de su dolorosa. Y lo hace con los cultos habituales de la cofradía que comienzan este viernes, 11 de septiembre, con la ‘Invocación al Dulce Nombre de María’, a partir de las nueve y media de la noche, en la Basílica de la Merced.
Será Luis Felipe Benítez Roldán, cofrade de las hermandades del Gran Poder y Amargura, de Sevilla, y Santo Crucifijo de Jerez, quien tenga al responsabilidad de glosar el dulce nombre de María en está, la undécima edición de este pregón mariano. Será presentado por Javier Jiménez López de Eguileta, cofrade también de la hermandad de San Miguel. El acto concluirá con el canto de la Salve.
El sábado, 12 de septiembre, se expondrá en besamanos a la dolorosa en la Basílica, desde las diez de la mañana hasta la una de la tarde, y a las ocho y cuarto de la tarde se celebrará una eucaristía solemne en honor de la Santísima Virgen, en su advocación del Dulce Nombre, con intervención del Coro de Capilla San Pedro Nolasco. A la conclusión de la misma se celebrará una convivencia en la casa de hermandad de la Buena Muerte, sita en la calle Nueva.