En este sentido, con el fin de reforzar el cumplimiento de la norma y evitar que las deposiciones queden impunemente en la calle, el teniente de alcaldesa ha señalado que desde Medio Ambiente se están manteniendo conversaciones con el Colegio Provincial de Veterinarios, con una empresa especializada en ADN de perros y con otros ayuntamientos, entre ellos, el de Málaga, para estudiar la posibilidad de articular en Jerez, como se ha hecho ya en otras localidades como Játiva, un nuevo sistema para relacionar las deposiciones halladas en la vía pública, con el animal al que corresponden, mediante un análisis del ADN.

Poblaciones cercanas como Lebrija también ha aprobado desde el pasado año 2015 esta ordenanza, que obliga a los propietarios de perros a realizar una prueba de ADN canino (que tiene un coste de 26 euros, al margen del gasto que supone tener a la mascota legalmente mediante el microchip y sus vacunas), y que está levantando mucha polémica. De hecho, las protestas han llegado hasta tal punto que se ha creado la Plataforma en Defensa de los Animales de Lebrija, que ya ha recogido casi 4.000 firmas que se han registrado en el Ayuntamiento sevillano para pedir que no tenga efecto dicha ordenanza. Las concentraciones y protestas no han dejado de producirse desde el pasado año, momento que en junio fue aprobado por unanimidad en el Pleno. La última acción de protesta fue el pasado 8 de enero, llegando a contar la concentración con más de medio millar de personas y el respaldo del partido animalista PACMA.

Como argumento para pedir que esta prueba no siga adelante, miembros de la plataforma señalan que la medida no solucionará los problemas ya que las personas que no tienen en regla a sus mascotas, mucho menos van a hacer la prueba de ADN al perro para que queden registrados en el censo que pretende el Ayuntamiento. Otro de los problemas que plantea la medida es la persona o encargados que recogerán la muestra de caca en la vía pública, una vez que se denuncie la infracción. Además pasado un tiempo la caca se puede contaminar por diversos factores, por lo que la prueba no sería efectiva.

En Jerez, El Ayuntamiento ha señalado que este sistema, que aún está en fase de estudio jurídico y práctico, sería una nueva medida intimidatoria para los propietarios de animales que no se preocupan de dejar la calle limpia y que abandonan el lugar sin recoger las heces de su mascota. Conllevaría contar con un banco de ADN de los perros de la ciudad para poder detectar al titular del animal en cuestión, en quien recaería la sanción correspondiente, en caso de infracción.

Paralelamente, José Antonio Díaz ha insistido en que es muy importante continuar concienciando a los ciudadanos de la responsabilidad que implica tener un animal de compañía, y de las obligaciones que conlleva sacarlo a la calle. Por este motivo, el Servicio de Comunicación del Ayuntamiento impulsará una campaña de sensibilización, para que los propietarios de perros recojan los excrementos de sus mascotas en la vía pública. La citada campaña está dirigida a los ciudadanos incívicos que hacen caso omiso de la Ordenanza Municipal que sanciona esta mala práctica y estará compuesta de un spot de televisión y de cuñas de radio. El trabajo de realización y de grabación será desarrollado por Onda Jerez Radiotelevisión. Se prevé que a mediados de febrero se pueda presentar públicamente, una vez que la grabación de secuencias tanto en el Centro Histórico, como en distintas barriadas y la zona rural se iniciará la semana que viene.

José Antonio Díaz ha explicado que “se trata de una campaña de respeto y de convivencia, que queremos hacer muy participativa, contando con distintas asociaciones de vecinos y colectivos. Es una realidad que existe esta mala práctica por parte de algunos propietarios de perros que ensucian nuestra ciudad y dan una mala imagen general ante los visitantes por el simple hecho de no recoger las heces de sus mascotas. Será una campaña llamativa y confiamos que efectiva”.

El teniente de alcaldesa se ha referido igualmente a otra medida importante que está en vías de ponerse en marcha por parte del Ayuntamiento. Se trata de un proyecto para dotar de ocho parques caninos las distintas zonas de la ciudad. Actualmente, se está estudiando en qué superficies podrían instalarse estos recintos y entre ellas, se barajan espacios como la Laguna de Torrox y los parques Timanfaya, Picadueñas, Puertas del Sur, La Plata, Niágara, Especies Autóctonas de Montealegre y el parque de Residencial Santa Teresa.

José Antonio Díaz ha explicado que “estas infraestructuras, permitirán el esparcimiento de nuestras mascotas, y permitirles disfrutar de espacios abiertos y hacer ejercicio”. También se ha referido a que se están manteniendo contactos con empresas interesadas, con el fin de que puedan participar, mediante la figura del patrocinio, en la financiación de los elementos de entrenamiento y de juego de los perros, que se instalarán en los parques, a cambio de la colocación de publicidad.