El Xerez quiere lograr la permanencia gracias al efecto Carlos Ríos, y el entrenador sanluqueño ha llegado a Chapín cargado de motivación para conseguir “un reto difícil, pero no imposible”. Y es que una de las primeras cosas que ha dicho el nuevo entrenador azulino es que la situación no es nueva para él: “Ya es la tercera vez que me veo en una como esta. Anteriormente, una salió bien y la otra mal, pero ahora tengo más experiencia y puede pensar que en Jerez lo vamos a conseguir. No es imposible y hay que intentarlo hasta el final. Tengo una ilusión enorme y una fuerza mental grande para trasladarla a los jugadores. Lo tengo claro y me voy a dejar la piel, la sangre y lo que haga falta para salvar al equipo”.
Ríos está ya totalmente centrado en el partido del domingo. Ya ha dirigido su primer entrenamiento y está convencido de que este fin de semana se van a sumar los primeros tres puntos: “Nos tenemos que marcar objetivos cortos. El primer día de entrenamiento ha sido muy bueno, mañana volveremos a ejercitarnos, el domingo vamos a ganar el partido y el lunes Dios dirá. No podemos ponernos a pensar en cuántos puntos necesitamos. Eso lo único que te hace es ocuparte espacio en la mente y perjudicarte”.