A José María Azores le tocó ver el comienzo del partido contra el Ciudad de Chiclana desde el banquillo, pero pudo disfrutar desde fuera del juego de unos compañeros que solucionaron el partido de manera rápida y efectiva: “Vimos desde el principio del partido que el rival no plantaba tanta cara y por eso vinieron tres goles en los siete primeros minutos. En la segunda parte, al no haber tanta intensidad, no nos relajamos pero queríamos hacer el trabajo que se nos pide. Nuestro juego es lo que es, e intentamos hacerlo lo mejor posible para marcar el máximo número de goles, sin dejar atrás eso, el propio juego que queremos”. Leer noticia completa