En tiempos dificiles como los que estamos viviendo, sigue habiendo empresarios que apuestan por abrir negocios en Jerez. El pasado viernes, el conocido empresario Eugenio Quilimaco Quirós inauguró el Restaurante ‘Pulpo y aparte’, situado en la céntrica calle San Miguel, 1.
Su descendencia gallega le ha hecho montar este negocio para diversificar un poco en Jerez. Se caracteriza principalmente porque sus productos vienen directos de Galicia y trabajará el pulpo en afeira, con cocinero gallego. En cuanto a la carta de vinos destacan, por supuesto, los Albariños y Ribeiros…sin olvidar los jerezanos.
La inauguración estuvo arropada de amigos, entre los que se encontraban: Paco Vega, Rosa Morán, Javier Benítez, Fátima Anguita, Marcos Camas, Manuel González Gamero, Manolo Molina, Ana Martín, Juan Almagro, Yolanda, María y Covadonga del Olmo, Cristina Martinez, Javier y Eugenio Martínez, Álvaro de la Calle, Javier Vega, Richard Vargas, Rosario Jiménez, entre otros y, por supuesto, el grupo de cocineros presidido por Juan Antonio Molina.
Desde Reporteros Jerez, les deseamos toda la suerte del mundo, enhorabuena.
CHARO CONDE
Muchisima suerte. Por alli nos veremos pronto.
Estuvimos anoche, y dejando aparte la calidad del genero que me parece bueno, lo que deja mucho que desear es la calidad de la mayoría de los camareros, tanto los que atienden en las mesas como los de barra. Mucho compadreo y cachondeo que se sale de tono. Evidentemente no es el restaurante del Palace, pero hay que cumplir unos mínimos para con la clientela. Por lo pronto conmigo que no cuenten mas, y por supuesto no lo recomendaré.
¿Porqué se ha borrado mi comentario crítico?
Un ejemplo más de lo mal que se gestionan los negocios en mi tierra. Si salimos de la típica ensaladilla y las papas “aliñás”, hay que justificar la inversión hecha recurriendo a precios desorbitados que colmen rápido la caja. Y nunca se puede ignorar la equidad que tiene que haber entre calidad y precio.
Cuando pasa el tiemoo y vemos los locales pidiendo un traspaso como fin de su trayectoria, siempre nos extrañamos. Y para colmo lo adornamos con un “el centro de Jerez no tiene vida”…