Han tenido que pasar años, muchos años, para que el sueño se convierta en realidad. Y aunque no ha sido con su paso de palio, María Santísima de Salud y Esperanza ya conoce las calles del centro de la ciudad, esas que serán en un futuro no muy lejano sus anfitrionas cuando pueda acompañar al Señor de la Clemencia en su estación de penitencia el Martes Santo. No fue bajo palio, ni falta que le hizo, porque la hermandad dispuso un interesantísimo paso para que la dolorosa se paseara en su recorrido hasta San Juan de Letrán, sede desde la que partirá el próximo sábado en el Vía-Lucis mariano que ha organizado la Unión de Hermandades.
Participará en tercer lugar, justo entre Loreto y Rosario del Beaterio, y está previsto que salga de San Juan de Letrán a las cinco y veinte de la tarde, para recogerse en San Benito a las doce y media de la noche. Su capataz, Eduardo Biedma, ha completado una numerosa cuadrilla que está estrenando la mesa de palio que lucirá en un futuro la dolorosa, y el acompañamiento musical será, nada y nada menos, que el del Carmen de Salteras, la banda que históricamente acompaña a la Esperanza Macarena en la Madrugá sevillana.