Martín Gómez Moreno ha dejado de ser el capataz del palio de las Lágrimas. Así se lo ha comunicado a la hermandad de laVera-Cruz por escrito el pasado 24 de abril, y lo ha hecho público un día después en un comunicado publicado en las redes sociales. En dicho comunicado, el capataz afirma que ha sido una ”decisión que, por mi vinculación con la cofradía de San Juan de los Caballeros así como por la devoción que me une a mí, y a mi familia, con la dolorosa, ha sido muy difícil tomar”.
Martín Gómez cumplía su segundo ciclo al frente de la cuadrilla de las Lágrimas, al que llegó por primera vez en el año 1998. Tras la pasada Semana Santa, y “por distintos motivos”, el capataz ha “creído conveniente separar nuestros caminos, por mi bien y por el de la propia hermandad”. Pese a su salida, y por los muchos años de relación con la cofradía de San Juan de los Caballeros, Gómez Moreno ha afirmado en su comunicado que “han sido años de confianza y respeto que agradezco profundamente. Jamás podré devolver a la Virgen el privilegio inmenso de poder ser su capataz, a la par que estoy tremendamente agradecido a la hermandad, y a las juntas de gobierno que confiaron en mí, por semejante regalo”.
Se abre ahora un proceso de elección de nuevo capataz para la cofradía que dirige José Ignacio Soto, hermano mayor con el que ha contactado Reporteros Jerez, quien ha rehusado hacer declaraciones, toda vez que todavía no ha “elevado a junta de gobierno la renuncia del capataz. Una vez que lo haga, será cuando se pronunciará la hermandad”.
Me alegro, chilla demasiado para ese palio.
A esa hermandad no le pega esa posturita de hombre.